Tras donde una mujer privo de la vida a sus hijos envenenándolos, se dio a conocer que estos sufrían acoso por parte del padre.
El abogado Jesús Mora Lardizábal, dio a conocer que Él fue quien colocó a la señora Mireya al final del precipicio y la obligó a dar el paso que ella tomó. La propia Procuraduría (capitalina) debe investigar hasta qué punto, hasta qué exceso, él la llevó para tomar esa decisión”
Tras el acoso de varios años por parte de su exesposo, y ante la falta de apoyo de las autoridades familiares de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) y la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, subrayó, Mireya tomó la decisión de suicidarse junto con sus tres hijos: Emiliano, de diez años, y las gemelas Aranza y Regina, de seis años, en su domicilio ubicado en la colonia San Jerónimo Lídice, delegación Magdalena Contreras.
En el lugar también fue encontrado muerto el padre de Mireya, de 70 años de edad. La esposa de éste, de 68 años, fue localizada con vida, pero inconsciente. La Fiscalía de Magdalena Contreras está a la espera de que la sobreviviente del caso se restablezca para tomar su declaración y deslindar responsabilidades.
La PGJ capitalina sigue como una de las líneas de investigación un posible caso de intoxicación por medicamentos.
En entrevista con Radio Fórmula, el abogado Jesús Mora Lardizábal manifestó que en dos averiguaciones previas, Mireya denunció hechos y abuso sexual por parte de su exesposo hacia los niños; sin embargo, la Juez Décimo Primero de lo Familiar la condenó a entregar a los menores al padre, argumentando que “las manifestaciones de los tres niños no fueron robustecidas por otros elementos de prueba, aunque sí las había”.
Ante eso, reveló que había una prueba de bostik, en la que Emiliano manifestó todo lo que el padre le hacía, pero la juez no le dio valor probatorio, “porque dice que es un instrumento meramente científico y que no es una prueba plena”.
Añadió: “Las declaraciones de las dos niñas no las valoró y, aparte, los peritajes psicológicos tampoco los valoró. Dijo la juez que no había elementos suficientes para privar al padre de la patria potestad y, por el contrario, en su sentencia la condena a ella (la madre de los niños) a la pérdida de la patria potestad”.
De acuerdo con las investigaciones del caso, en la cama donde fueron halladas las cinco personas había una biblia con un cristo de madera, una pistola calibre .25, una carta póstuma y un mensaje dentro de un folder.
El hallazgo de las víctimas se realizó poco después de las 19 horas del pasado miércoles 7, en un domicilio ubicado en la Calle San Bernabé, número 907, en la colonia San Jerónimo Lídice de la delegación Magdalena Contreras.
Peritos en criminalística, fotografía y química recabaron los indicios de prueba, mientras que la Policía de Investigación realiza diversas entrevistas, entre ellas al empleado que acudió al inmueble. Ahí se enteró de que la mujer podría ser la persona que intoxicó y privó de la vida a las víctimas.
(Con información de Proceso)