Gabriel Sánchez Andraca
Esa fue la pregunta que hicimos a algunas de las numerosas personas que concurrieron al quinto y último informe de la presidenta municipal Mely Macoto Chapuli, en el que dio cuenta del extraordinario trabajo realizado por el ayuntamiento que ella presidió: dos nuevas escuelas secundarias construidas y equipadas; ampliación y renovación de las existentes; creación y construcción de desayunadores escolares; pavimentación y adoquinamiento de calles; electrificación de pueblos y colonias que no tenían ese servicio; drenaje y agua potable en las zonas donde no existían esos servicios; alumbrado público y un boulevard de cuatro carriles y de más de kilómetro y medio a la entrada de la población, vía que comunica en forma rápida con municipios vecinos (este fue inaugurado ayer) Pero sobre todo, liquidación de la deuda de más de 60 millones que dejó el ayuntamiento anterior y la elevación de los ingresos propios en más de 17 veces.
Deja una administración, al ayuntamiento de Morena que le sucederá en el mando, sin deudas, en números negros y con suficientes recursos para continuar con el programa que con éxito fue iniciado. Todo un ejemplo de cómo deberían trabajar las autoridades municipales del estado y del país.
¿Porqué entonces los electores votaron por los candidatos de Morena?
Esta pregunta fue hecha a la secretaria general del PRI en la entidad Isabel Merlo Talavera y nos dio su percepción, muy priísta por cierto: “Hemos visto que no siempre un buen ayuntamiento, se traduce en votación para los candidatos del partido? Algo pasa”.
La respuesta de otros priístas de diferentes sectores fue terminante: “Eso se debe a los errores de las cúpulas del partido; comité estatal y comité nacional. Imponen a los candidatos menos adecuados, con menos sensibilidad, con menos prestigio y eso pasó ahora aquí en Coronango. La planilla impuesta por el PRI, la encabezó una persona que no tenía simpatías y en su integración había personas ajenas por completo al municipio, como la que será la regidora plurinominal del PRI en el ayuntamiento próximo, que es de Morena, de apellidos López Rodríguez. Es una persona de Puebla, que vive en Puebla y que ocupaba un cargo en el comité estatal. Esperó y en el último momento, cuando se dieron cuenta que podría ganar la plurinominal porque en la campaña la planilla priísta no levantaba, la metieron a fuerza, seguramente sabiendo que los priístas la verían mal, pero que podía ganar la posición mencionada”
Y así fue: la planilla del PRI, obtuvo menos votos, fueron varios miles menos, de los que obtuvo Enrique Doger Guerrero, que fue el candidato a la gubernatura del estado.
La respuesta anterior fue la generalizada entre los priístas del municipio mencionado, vecino de Cuautlancingo.
“La designación de candidatos, nos dice un viejo priísta, generalmente se hacen en el Partido Revolucionario Institucional, sin tomar en cuenta la opinión de las bases del partido. Se imponen de acuerdo a los intereses personales de políticos con poder en el momento de las designaciones o de grupos de dentro del partido, como las centrales obreras”.
La votación abrumadora a favor de López Obrador, arrastró a muchos votantes a sufragar a favor de muchos candidatos de Morena, completamente desconocidos y no capacitados para ejercer el poder, es decir, sin oficio y sin sensibilidad política y eso tendrá repercusiones a corto, mediano y largo plazo.
Muchos de los ofrecimientos de campaña de los candidatos del Movimiento de Regeneración Nacional, no podrán cumplirse, porque la realidad no lo permitiría, pero muchos otros sí, pero para ello se requerirá de voluntad política y se está viendo que una gran cantidad de figuras del “morenismo” no la tienen ni la tendrán y “ahí está el detalle”.
A don Andrés Manuel no le bastará con el ejemplo que él pudiera dar, se requerirá firmeza y hasta dureza de su parte, para obligar a sus huestes a se congruentes entre lo que predican y lo que hacen.