Redacción / Información nacional.
Lo que comenzó como una curiosa anécdota para los habitantes de la colonia Cuarta Transformación, en el municipio de Tultitlán, se ha convertido en un tema de preocupación. En las últimas semanas, los vecinos de la colonia se han visto sorprendidos por el cambio de nombre de las calles, que ahora incluyen denominaciones como ‘Me canso ganzo’, ‘Abrazos, no balazos’, ‘Reforma judicial’, ‘Tianguis del Bienestar’ y ‘Tren Maya’. Sin embargo, la sorpresa no se debe únicamente a los inusuales y hasta erróneos nombres, como es el caso de ‘Me canso ganzo’, sino a la falta de información previa sobre estos cambios.
Los residentes de la colonia, que antes se conocía como ‘El Paraje’, han manifestado su incertidumbre y preocupación, ya que no fueron notificados sobre la modificación ni del nuevo nombre de la colonia ni de los de las calles. Los habitantes temen que esta decisión pueda generar problemas en trámites oficiales, como la gestión de servicios o la obtención de documentos legales, debido a la confusión que puede ocasionar la utilización de nombres poco convencionales y con errores ortográficos.
Una medida para regularizar terrenos ejidales
El gobierno municipal de Tultitlán ha justificado la decisión a través de un comunicado oficial. Según las autoridades locales, el cambio de nombre responde a un proceso de regularización legal de la colonia, antes conocida como ‘El Paraje’. Esta colonia se encontraba afectada por disputas relacionadas con terrenos ejidales, lo que complicaba su legalización y el acceso a servicios y beneficios gubernamentales.
Las autoridades municipales aseguraron que la renombrada colonia Cuarta Transformación y sus calles se beneficiarán de esta medida al otorgarles “identidad y certeza jurídica”. Se estima que más de 3 mil hogares de la zona verán un impacto positivo gracias a la regularización de la tenencia de la tierra. No obstante, el comunicado no profundizó en los detalles específicos de cómo los nuevos nombres contribuyen a este proceso ni en los criterios que llevaron a elegir esos términos tan particulares.
Preocupación entre los vecinos
Pese a las explicaciones oficiales, los residentes continúan desconcertados. Para muchos, los nombres de las calles parecen más una referencia a frases políticas populares que un intento por resolver un problema administrativo. Algunos habitantes cuestionan la validez de un proceso que no ha sido completamente explicado ni acompañado de un plan claro para evitar complicaciones en su vida cotidiana.
El temor de los vecinos es que la falta de un proceso de comunicación adecuado pueda traer consigo retrasos en servicios esenciales como el suministro de agua, electricidad o la recolección de basura, así como en la resolución de trámites burocráticos, que podrían ser más complicados debido a los cambios de nomenclatura.
Un paso hacia la regularización, pero con incertidumbre
Aunque el gobierno municipal ha enfatizado que esta regularización tiene como objetivo otorgar seguridad jurídica a las familias, la falta de claridad en la implementación y la naturaleza poco convencional de los nuevos nombres de las calles genera desconfianza entre los pobladores. Sin una comunicación adecuada y sin una explicación más detallada de los beneficios tangibles que traerá este proceso, la decisión sigue siendo objeto de debate entre los ciudadanos de Tultitlán.
El futuro de la colonia Cuarta Transformación sigue siendo incierto, pero lo que es claro es que el cambio de nombres ha dejado una huella indeleble en la memoria colectiva de sus habitantes.
