En México aún queda un largo camino por recorrer para terminar con la explotación infantil , pues de acuerdo a las cifras de la Encuesta Nacional de Trabajo Infantil (ENTI) de 2019 del Inegi, más de 3.3 millones de niños y adolescentes son víctimas de casos relacionados con este delito.
Los cinco estados de México con mayores porcentajes de explotación infantil son Oaxaca (21.5), Puebla (18.3), Chiapas (18.3), Michoacán (17.6) y San Luis Potosí (14.3).
Datos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) revela que en el mundo 400 millones de niñas y niños son sometidos a las peores formas de explotación infantil, con trabajos denigrantes y peligrosos para su salud y desarrollo.
De ahí que el 16 de abril se haya creado el Día Mundial Contra la Explotación Infantil, una efeméride que permite visibilizar la magnitud de un grave problema que atañe a México y el mundo.
El organismo internacional, menciona Gabriela Ruiz, documentó las peores formas de trabajo infantil en donde se identifica la utilización de este sector poblacional en campos mineros, agrícolas y ahora en su uso para la mendicidad forzosa, en donde hay una expresión marcada en nuestro país.