Redacción / Información nacional.
Según una orden directa del presidente Andrés Manuel López Obrador, los gatos que viven en el Palacio Nacional, incluyendo a «Nube», «Bowie», «Roja» y otros 16 gatos, serán reconocidos por el gobierno federal de México como «activos fijos vivos». «. Esto significa que se les garantiza un presupuesto para su alimentación y cuidado de por vida.
La directora General de la Conservaduría de Palacio Nacional y Patrimonio Cultural, Adriana Castillo Román, reveló en una entrevista con EL UNIVERSAL que, debido a este reconocimiento, se les ha colocado un chip a los 19 gatos que viven en el recinto histórico. Este chip permite monitorearlos y brindarles un cuidado adecuado
La medida de reconocer a los gatos como «activos fijos vivos» es parte de una política pública de bienestar animal tanto para los felinos como para las personas que trabajan, visitan y habitan el recinto del Palacio Nacional. Se busca asegurar que los gatos reciban atención integral, incluyendo alimentación, vacunación, esterilización y cuidado de su salud.
La historia de los 19 gatos en el Palacio Nacional se remonta a diciembre de 2018, cuando el equipo del presidente López Obrador llegó a las instalaciones y se percató de que los gatos estaban descuidados y viviendo en condiciones insalubres. Ante esta situación, se decidió implementar una estrategia de protección y bienestar animal para los felinos.
La población de gatos en el Palacio Nacional está compuesta por 19 ejemplares, algunos de los cuales tienen entre 13 y 16 años de edad. Se les ha implantado un chip con su registro numérico y una ficha de identidad que incluye información sobre su lugar favorito, sexo, edad aproximada, color, peso, enfermedades y nivel de tolerancia al contacto con personas. Además, cada gato tiene su propia casa en los jardines Desértico y Nezahualcóyotl del recinto.
La medida de reconocer a los gatos de Palacio Nacional como «activos fijos vivos» es un hito en la historia de México y representa un avance en la protección y bienestar animal en el país. Se espera que otras instituciones, tanto públicas como privadas, sigan este ejemplo y brinden atención adecuada a los animales que forman parte de su entorno.