Redacción / Información nacional.
La icónica empresa estadounidense “Avon Products Inc.”, conocida por su amplia gama de productos cosméticos, ha sorprendido al mundo con su reciente declaración de “bancarrota” bajo el capítulo 11, en el Tribunal de Quiebras del Distrito de Delaware.
La decisión, anunciada el pasado lunes 12 de agosto, marca un giro dramático en la historia de esta compañía, que ha sido un pilar en la industria de la belleza durante más de un siglo.
El capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos, permite a las empresas reestructurarse y continuar operando, mientras están protegidas temporalmente de sus obligaciones de pago hacia los acreedores.
“Avon Products Inc.”, ha optado por esta medida con la esperanza de reconfigurar sus operaciones y encontrar una salida viable a su situación financiera. Sin embargo, la noticia ha causado gran preocupación, especialmente en mercados internacionales clave como México.
La quiebra de “Avon” se produce en un contexto de creciente controversia legal. La empresa enfrenta una avalancha de 386 demandas por daños personales, que alegan que el talco en sus productos cosméticos puede ser cancerígeno.
La magnitud de las demandas ha generado una carga financiera abrumadora para la compañía, que deberá desembolsar aproximadamente 225 millones de dólares, solo para defenderse en los tribunales.
La noticia ha sido recibida con gran alarma en México, donde muchas familias, en su mayoría lideradas por mujeres, dependen económicamente de la venta de productos Avon a través de catálogos; los vendedores y consumidores mexicanos están inquietos sobre el futuro de sus compras y negocios, preguntándose si la quiebra de la compañía afectará la disponibilidad de productos y su estabilidad financiera.
Este episodio destaca no solo los desafíos financieros de “Avon”, sino también el impacto que las disputas legales pueden tener en las comunidades y en la cadena de suministro global.
A medida que la compañía busca una solución bajo la protección del capítulo 11, el mundo observa de cerca el desenlace de una de las marcas más emblemáticas de la cosmética, esperando que la reestructuración permita preservar parte de su legado y sus operaciones en mercados clave.