El aspirante presidencial por el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Marcelo Ebrard, descartó este viernes la posibilidad de abandonar el partido y abanderar otra postulación electoral.
Ebrard, quien visitó el Instituto Nacional Electoral para pagar una multa, reclamó que se revise la selección de las casas encuestadoras que el pasado jueves fueron elegidas por la dirigencia del partido para optar por el nuevo candidato presidencial.
Ebrard, quien hizo su queja luego de que su representante en la interna presidencial, Malú Micher, le informara largo proceso llevado a cabo en la cita a puertas cerradas, aclaró que se refería a las dos empresas seleccionadas puntualmente, sobre las que no se especificaron sus nombres.
Por su parte, el senador Alejandro Rojas, que representa a Ricardo Monreal en la interna, manifestó su disposición de retirar su propuesta de encuestadora al hablar en un video compartido a través de Twitter, con el objetivo de “abonar a la construcción de la unidad democrática de Morena”.
Mario Delgado, presidente del partido, emitió un comunicado esa misma tarde asegurando que el proceso cuenta con un blindaje y que es “100% auditable”. Desde Palacio Nacional, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se dirigió a las seis corcholatas y pidió una priorización de la unidad de la Cuarta Transformación.
Ante las especulaciones de que iba a marcharse al Movimiento Ciudadano, Ebrard aseveró que presentó una serie de denuncias ante la dirigencia de su partido por supuesto “acarreo monumental” del equipo de Claudia Sheinbaum para su campaña, así como el uso de recursos públicos.
El excanciller explicó que tal actuación es la prueba de que no movería su aspiración a otro partido y para apoyar tal declaración, manifestó que el posible último tramo de la interna se vio marcado por la cantidad de denuncias del partido naranja en su contra, siendo esta una razón para haber pagado la multa de 10,000 pesos por la difusión de propuestas de seguridad antes del periodo de campaña.