Nicolás Dávila Peralta / Puebla, Pue.
**TV Azteca califica al gobierno de comunista y el PAN pide a los padres de familia quemar los libros**
Através de discursos, medios de información nacionales, volantes y redes sociales, se ha desatado una campaña nacional en contra de los libros de texto gratuitos que se distribuirán en las escuelas públicas y privadas en el ciclo escolar 2023-2024.
La campaña está encabezada por la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF), una organización creada en 1917 en contra de la educación laica y la prohibición constitucional de la enseñanza religiosa en las escuelas; hasta hoy, esta organización ha estado vinculada con organizaciones de extrema derecha, incluso de corte nazi-fascista.
El 16 de mayo, la UNPF solicitó un amparo en contra de la impresión y distribución de los libros de texto gratuitos, argumentando que no se ajustaban a los planes de estudio y se violaba el procedimiento establecido para su elaboración.
El 29 de junio, Yadira Elizabeth Medina Alcántara, jueza Tercero de Distrito en Materia Administrativa en la Ciudad de México, concedió el amparo donde pide a la Secretaría de Educación Pública (SEP) muestre que siguió el procedimiento legal.
Sin embargo, la UNPF desató una campaña, a la que han hecho eco el Partido Acción Nacional (PAN), un sector de la iniciativa privada y algunos medios de información, donde se acusa al gobierno de querer adoctrinar a la niñez en la ideología comunista.
De este modo, se descalifican totalmente los libros de texto gratuitos, se critica su contenido y el método de enseñanza-aprendizaje que proponen, pero, sobre todo, se afirma que están orientados a corromper a la niñez con la ideología marxista.
Un análisis de los libros que distribuirá la SEP para el próximo ciclo escolar, muestra una nueva forma de enseñar, donde se motiva al alumno a investigar, analizar y valorar los conocimientos y vincularlos con la realidad que vive.
Sin embargo, los textos tienen algunos errores que muestran que el trabajo de revisión editorial no fue cuidadoso como lo exige este tipo de material didáctico, errores que no influyen en el proceso educativo, toda vez que la responsabilidad recae en los profesores.
La campaña en TV Azteca
A partir de la segunda quincena de junio se ha desatado una campaña de desinformación con un solo calificativo: el comunismo y ha sido a través de la empresa televisora Azteca, donde la campaña ha llegado a miles de hogares y ha sembrado dudas y hasta temor sobre los peligros de los libros de texto.
La última semana de julio, los televidentes pudieron escuchar y ver en el noticiero Hechos, al conductor Javier Alatorre afirmar: “México está en peligro por un virus que se creía erradicado: el virus comunista, su resurgimiento está en la educación comunista que la Secretaría de Educación Pública busca imponer a las niñas y los niños de México. Estamos en una conspiración fraguada por comunistas trasnochados…”
Mientras hablaba, en la pantalla aparecía un libro de texto gratuito con el símbolo de la hoz y el martillo, que es el símbolo de los grupos comunistas que existieron hasta la caída de la Unión Soviética en 1992.
Esa misma semana, en redes sociales apareció Marko Cortés, presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), llamando a los padres de familia a rechazar los libros de texto gratuitos por contener una ideología comunista.
Para enfrentar este peligro pidió que, en caso de que los libros sean entregados a sus hijos, los quemen o les arranquen aquellas hojas que consideren “peligrosas” para la vida de los niños.
Detrás de la campaña, las elecciones
De acuerdo con analistas políticos, detrás de esta campaña contra los libros de texto gratuitos se encuentra un interés electoral de las organizaciones de extrema derecha.
Para esto, recuerdan que la Unión Nacional de Padres de Familia, vinculada al sector conservador de la Iglesia Católica y a grupos radicales como el Yunque, se opuso a los libros de texto gratuitos desde su creación, en 1960, en el gobierno de Adolfo López Mateos, y que la explicación fue la misma: el peligro comunista.
El argumento enarbolado en ese año y en años posteriores por la UNPF fue que la educación laica le abre las puertas al comunismo.
Desde hace dos semanas, la UNPF ha empezado a repartir por todo el país volantes en contra de los libros de texto y a recabar firmas para presentar una queja ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIHD).
La académica e investigadora Violeta Vázquez Rojas, señala que no hay argumentos de peso en contra de los libros de texto y afirma que en la campaña negativa participan dueños de editoriales que han perdido contratos con el gobierno.
Pidió no olvidar que Claudio X, González, el creador y dirigente del Frente Amplio por México, formado por el PAN, el PRI y el PRD, calificó a los profesores del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) como “pinches delincuentes”.
Hoy, resucitar al comunismo es una estrategia de los grupos políticos y económico de extrema derecha para infundir miedo en los electores al acusar al actual gobierno de comunista, a fin de ganar votos para el Frente Amplio por México.
