Román Valle / Ciudad de México.
El pasado miércoles 2 de octubre, la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad reformar la Ley Federal del Trabajo (LFT); una de las iniciativas fue la aprobación de una nueva versión de la “Ley Silla”, la cual consiste en obligar a los empleadores o patrones, a proveer de sillas a sus trabajadores, para que tengan descansos periódicos durante su jornada laboral.
La nueva versión a esa ley, fue avalada de manera rápida con 476 votos a favor y cero en contra, por lo que no tuvo que ir a comisiones para que la dictaminaran, y se votó de inmediato; de la misma manera, fue enviada al Senado de la República para continuar el proceso legislativo.
Cabe mencionar que esta misma reforma fue aprobada por el Senado de la República en febrero pasado, y la minuta fue enviada a la Cámara Baja; ahí, la Mesa Directiva la turnó a la Comisión de Trabajo y Previsión Social, para que realizara el dictamen, pero no prosperó el proyecto, por lo que al terminar la LXV Legislatura, fue desechada.
La reforma también contempla prohibir a los patrones que obliguen a sus trabajadores a permanecer de pie durante la totalidad de la jornada laboral, e impedirles tomar asiento periódicamente durante el desarrollo de sus funciones.
También obliga a los patrones a proveer el número suficiente de asientos o sillas con respaldo, a disposición de todos los trabajadores en los sectores de servicios, comercio y centros de trabajo análogos, para la ejecución de sus funciones o para el descanso periódico durante la jornada laboral.
En un artículo transitorio, la iniciativa establece que las empresas contarán con un plazo de 180 días contados a partir de la entrada en vigor del decreto, para adecuar su normativa interna y dar cumplimiento a lo establecido.
Finalmente, el diputado Ricardo Monreal mencionó: “En muchos ámbitos laborales, a las personas trabajadoras se les imponen demasiadas obligaciones, como permanecer de pie durante mucho tiempo, jornadas excesivas de trabajo, a veces superiores a las 48 horas a la semana, y que existe una explotación, acoso y discriminación laboral, por lo que sigue siendo urgente definir reformas legislativas, para atender diversas problemáticas en la materia”.