* En lo que va del año, el municipio de Acatlán ha ocupado las planas de los diarios nacionales e internacionales, por el linchamiento de dos inocentes y el asesinato de dos agentes Federales
*Los robos de automóviles, motocicletas y a transeúntes son el pan de cada día
Redacción/La Mixteca.
Los homicidios, robos y asaltos, son el pan de cada día de los pobladores de la Mixteca, lo cual genera miedo, impunidad y el querer tomar la justicia por propias mano. Tan solo la semana pasada, en el municipio de Acatlán de Osorio, en un operativo orquestado por la Policía Federal para capturar a Orlando Orea, acusado de asesinar a un ciudadano norteamericano en el año 2012, fueron ultimados dos agentes, lo que provocó el pánico entre los habitantes.
En la intervención policial, el sujeto logró darse a la fuga, sin embargo, horas más tarde fue capturado y presentado ante la Fiscalía General del Estado (FGE) para conocer su situación legal, ya que es buscado por la Oficina Federal de Investigación (FBI por sus siglas en inglés), por contar con una orden de detención provisional con fines de extradición internacional; a ello se la suma el asesinato de los dos agentes federales.
En esa misma región, el pasado 29 de agosto, Alberto Flores Morales y Ricardo Flores Rodríguez, de 56 y 21 años respectivamente, quienes eran tío y sobrino, fueron quemados vivos al ser confundidos por la población como “robachicos”; la tragedia fue trasmitida en vivo a través de las redes sociales.
Por este hecho fueron detenidas algunas personas, así como autoridades policiacas por no actuar conforme a los protocolos para evitar el linchamiento. No obstante, la familia continúa con el dolor de la pérdida de sus dos familiares y sigue exigiendo justicia.
Por estos acontecimientos, la comunidad de Acatlán de Osorio, que se ubica a casi tres horas de la capital poblana, ha sido noticia en diarios locales, nacionales e internacionales. Los acatecos tienen el temor de que “la región se vuelva un foco rojo donde la violencia impere”; así lo manifestaron.
Armando Romo Sánchez, párroco del templo de San Juan Bautista, señaló en entrevista que la violencia se está dando en todo el país a consecuencia del mal gobierno y la pérdida de valores. “La violencia es a nivel nacional. Todos tenemos responsabilidad de lo que ocurre en el país; los gobiernos por la corrupción que abunda y la sociedad por que no ha sabido comportarse, ser más racional, más humana, mas cristiana y se ha dejado llevar por la violencia”, subrayó el clérigo.
Agregó que la iglesia también ha sido víctima de la delincuencia, pues la gente se lleva las limosnas. Recordó que hace aproximadamente dos años entraron a robar al templo, él encontró a la persona que estaba delinquiendo pero las autoridades no procedieron, pues no encontraron pruebas suficientes para encarcelarlo. Aunado a ello, refirió que en delitos menos graves, las personas salen libres en pocos días, lo que permite que sigan infringiendo la ley.
Finalmente, aseveró que la población, ante los recientes sucesos, vive con miedo; sin embargo, hace un llamado a la gente a que sigan como modelo la vida de Cristo, quien actuó siempre con amor y justicia, dejando de lado el rencor y el odio. “El amor de Cristo es la salvación de todo”, recalcó.
Cabe señalar que datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), muestran el deterioro generalizado del país; 32 municipios de 19 estados sufrieron más de 100 asesinatos en los primeros ocho meses del año; en siete estados hubo más de mil homicidios durante este periodo, y en la mitad de las entidades federativas se cometen más de dos homicidios dolosos por día. Además, dio a conocer que tan solo en el estado de Puebla, se incrementó en un 63 por ciento el caso de secuestros reportados, y los homicidios dolosos aumentaron 33 por ciento.
La violencia en otros municipios
Acatlán ha sido el foco rojo en estos días; no obstante, en los demás municipios de la Mixteca la violencia e inseguridad es una constante para sus ciudadanos. Por nombrar algunos casos, en Izúcar de Matamoros en una sola semana han sido localizados dos cuerpos con impactos de bala en la comunidad de San Juan Raboso, lo que generó el temor en sus habitantes.
El primero, fue hallado entre los sembradíos de maíz, a un costado de la ex hacienda, y fue identificado como Miguel Huerta alias, “El Tintes”, quien presentaba varios impactos de bala; unos días después, el cuerpo de Erasmo Hernández, de 49 años, originario del barrio de San Juan Coahuixtla, apodado “El Dura”, fue encontrado en el antiguo camino a Raboso, de quien se dice fue asesinado de varios disparos en la espalda ,para robarle sus toros.
Mientras que en Tehuitzingo, un joven de 22 años fue acribillado a unos pasos de su casa; su familia lo halló bañado en sangre. En ese mismo municipio, la riña entre dos vecinos terminó en tragedia, pues Guadalupe Mestizo García, de 45 años, fue lesionado con un arma de fuego y posteriormente falleció. Cuerpos flotando en los ríos también han alarmado a los mixtecos; en este mes, se han localizado tres. El último caso se registró en la presa de Cruz Verde, en Chiautla de Tapia.
Unas semanas antes, vecinos del barrio de Los Reyes perteneciente a Izúcar de Matamoros, hallaron el cuerpo de un sujeto en estado de putrefacción, el cual se encontraba en la orilla del río Nexapa. Ese mismo día fue localizado otro cuerpo en el río que atraviesa por Tlancualpicán. Hasta el momento los tres cadáveres siguen sin ser reconocidos.
Otro de los problemas son los robos de autos y motocicletas, los cuales ya son la constante en la región, y últimamente los asaltos a transeúntes, pues en días anteriores una mujer fue atracada con lujo de violencia por un joven que viajaba en su moto, y al oponerse, la víctima resultó con varias lesiones.
Ante los violentos hechos, los habitantes de los diferentes municipios mixtecos se sienten prisioneros en sus propias comunidades, temiendo por su seguridad y la de su familia, señalando que “las autoridades han fracasado en su deber de vigilar y mantener la paz”.
