**¡Por primera vez en la historia! Izúcar de Matamoros atraviesa su peor crisis de seguridad **
Omar Escamilla
A casi 15 meses de la toma de protesta de la administración 2021-2024 encabezada por la alcaldesa municipal Irene Olea Torres, la ciudad atraviesa una crisis de inseguridad como nunca se había visto.
Situación que tiene como protagonistas los asesinatos registrados a plena luz del día en el centro de la ciudad, las diferentes balaceras del cierre de 2022 e inicios de 2023, intentos de secuestros en el transporte público, cuerpos putrefactos encontrados en el rio Nexapa, robo de vehículos en los diferentes barrios, colonias y comunidades del municipio, asaltos a mano armada en las calles y callejones del Centro Histórico, incremento del narcomenudeo en las periferias de la mancha urbana y linchamientos derivados del hartazgo de la ciudadanía.
Hechos que ponen en riesgo la integridad de los habitantes de Izúcar de Matamoros, al verse expuestos a estos peligros en el ejercicio cotidiano de sus labores. ¿Cuántos de nosotros no hemos sido amagados por criminales mientras recorríamos las calles de la ciudad después de vernos con amigos, familiares o de camino al trabajo?
Datos proporcionados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) del Gobierno Federal, señalan que a partir de octubre de 2021 (Fecha en la que entraría en funciones la administración 2021-2024) se dispararon las denuncias por diversos delitos, entre los que destaca el robo de vehículos, con 191 casos registrados.
¡Pero esto no es todo!, puesto que, con relación a los datos presentados por el ENVIPE 2022, los delitos que no son denunciados equivalen al 93.2%. de los casos; esto quiere decir que la cifra negra (actos delictivos que no son denunciados) es de un 6.8%.
Tomando en cuenta estos valores y aplicándolos a la situación Izúcarense, la cifra real de robos de vehículos en el municipio equivale a 2 mil 618; 175 mensuales y 6 diarios, casos que no son denunciados por miedo a las represalias de los delincuentes y por la incapacidad de reacción del gobierno ante esta situación.
Los robos de vehículos en el municipio han tenido un aumento del 20% en las cifras registradas a comparación de 2021, seguido de robos a transeúntes con 31.3% y narcomenudeo con 123% al alza.
¿Cuál sería la solución a esta problemática? De primera mano se requerirá reventar la burbuja de egocentrismo y negacionismo en la que se encuentra envuelta la presidente y el amplio grupo de operadores políticos que le acompañan, conformado por amigos y familiares, que como lo hemos denunciado con anterioridad se encuentran muy bien ubicados en diversos puestos del gobierno municipal.
Cobrando salarios de ensueño, mientras el resto de los trabajadores reciben pagos miserables a cambio del demandante trabajo que realizan
Y LA ASUTERIDAD ¿DÓNDE QUEDO? situación que se puede identificar con facilidad en la Secretaría del Bienestar encabezada por Javier Santiago Reyes, quien ha lucrado de forma vil con su cargo, explotando a los trabajadores de su área, obligándolos a realizar funciones de carga y adornado público bajo la justificación de “Son Órdenes de la jefa’’ haciendo referencia a Olea Torres, lavándose las manos de ésta escandalosa situación.
Punto 2. Se debe analizar los principales focos rojos en incidencia delictiva con la finalidad de identificar los factores que detonan estos hechos en las locaciones, recordemos que un crimen no es una situación espontánea que surge de la nada, este en realidad deriva de la suma de factores que favorecen a la realización de actividades ilícitas, como lo son la falta de alumbrado público, la falta de recursos materiales de los cuerpos policíacos, así como la falta de fomento al desarrollo económico en el municipio.
Punto 3. Instituciones seguras confiables y eficientes, en la atención de casos relacionados a la criminalidad en Izúcar de Matamoros, el mal desempeño de las fuerzas policiales no son más que el reflejo del nulo interés de una administración que se encuentra concentrada en realizar actos de simulación, dando una atención decrépita a la seguridad pública de la ciudad.
Izúcar de Matamoros se encuentra en los reflectores de los medios de comunicación estatales y del gobierno del Estado, de forma lamentable, derivado de la ola de asesinatos, robos y balaceras que se han visto sin freno en los últimos 15 meses al interior del municipio.