Abraham Onofre / Izúcar de Matamoros, Pue.
En menos de 12 horas, el pasado jueves 17 de agosto se registraron cuatro homicidios en el municipio de Izúcar de Matamoros; el primer caso se trató de un doble asesinato, presuntamente en legítima defensa, ya que el dueño de un local se habría defendido de un asalto a mano armada; otro ocurrió en medio de una persecución y uno más se trataría de una ejecución en los campos de cultivo.
Estos casos, dejan al descubierto la inseguridad que azota al municipio de Izúcar, pues el derramamiento de sangre causa miedo entre los habitantes, quienes han señalado que la estrategia de seguridad implementada por el gobierno de la alcaldesa Irene Olea Torres, es ineficaz, por lo que la delincuencia los ha rebasado.
Abaten a dos asaltantes en el centro de Izúcar
Una gran indignación causó entre la ciudadanía de Izúcar de Matamoros, el caso de dos presuntos delincuentes que fueron abatidos luego de que, presuntamente, intentaran asaltar un establecimiento que funciona como ferretería y centro de reciclaje, en la zona centro de la ciudad y a plena luz del día, lo que deja al descubierto que los pobladores se encuentran hartos ante la ola de inseguridad que azota a la región.
Los hechos se registraron alrededor de la 1:30 de la tarde, del jueves 17 de noviembre, en un local ubicado en la calle Guadalupe Victoria, casi esquina con Benito Juárez, donde supuestamente arribaron tres sujetos a bordo de una motocicleta.
De acuerdo con información recabada en el lugar de los hechos, los hombres portaban una pistola tipo escuadra y un arma “hechiza”, con las cuales presuntamente intentaron asaltar al dueño del local y a la encargada, quien en ese momento estaba acompañada de dos de sus hijos.
Sin embargo, dos de los sujetos fueron recibidos con impactos de proyectil de arma de fuego por el dueño del establecimiento; uno murió instantáneamente y su cuerpo quedó tendido frente al mostrador del local; el occiso era de tez morena, tenía un pantalón de mezclilla azul, una sudadera con gorro azul claro, portaba un arma tipo escuadra, la cual estaba a un lado del cuerpo.
El segundo hombre murió en la banqueta, era de tez clara, tenía unos tenis negros, un pantalón de mezclilla azul, una playera blanca, una mochila negra y un casco que le cubría el rostro, a un metro de él quedó el arma “hechiza”.
La moto en la viajaban los dos hombres la dejaron estacionada metros adelante del local, por lo que quedó a disposición de la Fiscalía General del Estado.
De manera extraoficial se indicó que hubo presuntamente un tercer delincuente que se dio a la fuga con rumbo desconocido, aunque esta versión no ha sido confirmada ni desmentida por las autoridades; también se dijo que el dueño de la ferretería se había dado a la fuga.
El hecho fue notificado al número de emergencia 911, por lo que al sitio arribaron paramédicos de Cruz Roja, quienes confirmaron que los hombres ya no contaban con signos vitales, por lo que policías municipales acordonaron la zona; posteriormente, llegaron agentes de la Fiscalía General del Estado de Puebla quienes iniciaron las investigaciones, realizaron el levantamiento de los cuerpos y de las evidencias.
Hasta el cierre de esta edición, no se tenía la identidad de los finados.
Comerciantes y vecinos se solidarizan con el dueño
Al lugar de los hechos, acudieron vecinos y comerciantes de la zona centro de Izúcar, quienes se solidarizaron con el dueño del establecimiento, con el argumento de que habría actuado en defensa propia, al asesinar a estos dos presuntos delincuentes, señalando que ellos también han sido víctimas de la delincuencia y están hartos de que las autoridades municipales no tomen cartas en el asunto.
Una mujer quien dice conocer a los dueños del establecimiento, resaltó que no confía en el sistema de justicia, ni en las autoridades, pues comentó que los elementos de Seguridad Pública no detienen a los delincuentes, y cuando lo hacen, son puestos en libertad, a pesar de que las víctimas presenten su denuncia formalmente.
Otro comerciante dijo en entrevista para Enlace Noticias que él también apoya totalmente al dueño del establecimiento, ya que también ha sido víctima de la delincuencia en su negocio, le han robado su vehículo y lo han asaltado, por lo que se encuentra harto de la inseguridad que se vive en Izúcar.
La opinión pública de los izucarenses señala que las autoridades no hacen nada por impedir que sigan cometiéndose robos, asaltos, intentos de secuestro, desapariciones de personas y hasta asesinatos, por lo que defendieron al atacante de estos delincuentes, ya que habría actuado en defensa propia.
Un ejecutado en campos de cultivo
Ese mismo día, por la tarde noche, encontraron el cadáver de un hombre con impactos de proyectil de arma de fuego en un campo de cultivo, a un costado de la carretera Izúcar–Acatlán, a la altura de la comunidad de “Los Amates”, perteneciente a Izúcar de Matamoros.
Tras el hallazgo fueron informadas autoridades de Seguridad a través del número de emergencia 911, por lo que al sitio arribaron policías municipales para acordonar la zona.
Información extraoficial indica que en el lugar fueron localizados más de tres casquillos percutidos y que el hombre en cuestión presentaba heridas de bala, por lo que pudo haber sido asesinado y luego abandonado en ese sitio.
Hasta el momento se desconoce su identidad, por lo que su cadáver tuvo que ser registrado en calidad de desconocido. Se sabe que el occiso tendría alrededor de 30 años de edad y podría tratarse de un taxista de Puebla capital.
Murió baleado en una persecución
El tercer homicidio ocurrió la noche del jueves en la carretera Izúcar–Matzaco, a la altura del tramo carretero conocido como la curva de la “S”, donde un motociclista fue perseguido por sus atacantes.
Al llegar a ese lugar, el hombre de aproximadamente 27 años de edad, fue interceptado y baleado en al menos dos ocasiones; los proyectiles de arma de fuego habrían impactado en la espalda y en uno de los brazos.
El masculino fue apoyado por automovilistas que pasaban por el lugar, quienes dieron aviso al número de emergencia y arribaron paramédicos, los cuales le brindaron los primeros auxilios y lo trasladaron al Hospital General de Izúcar de Matamoros, donde el personal de salud hizo lo posible para salvarle la vida, pero horas después falleció.