Abraham Onofre / Izúcar de Matamoros, Pue.
Alrededor de las 8:30 de la mañana este jueves 4 de julio, Angélica N., de 28 años de edad, acudió a una cita médica con el ginecólogo, la cual ya tenía programada en el Hospital General de Izúcar de Matamoros.
Los hechos ocurrieron cuando la mamá primeriza acudió a su consulta, la cual estaba agendada, pero ella presentaba dolor obstétrico, sin sospechar que esos dolores eran por el trabajo de parto.
Al sentirse mal, la joven acudió al baño del nosocomio y sin imaginar que ya se encontraba en trabajo de parto, al intentar hacer sus necesidades fisiológicas, el bebe fue expulsado, cayendo en el piso del sanitario; posteriormente lo levantó con su suéter y pidió ayuda a los médicos ante el asombro de su alumbramiento.
Al escuchar los gritos de ayuda, enfermeras y médicos llegaron al sanitario, así como personal de pediatría para brindarle la atención adecuada.
Finalmente, la mujer fue atendida, se dio a conocer que el bebé fue una fue una niña, que pesó más de 3 kilos y mide 46 centímetros. La mamá continúa en área de recuperación, y se espera le hagan otros estudios, así como a la recién nacida, para descartar alguna posible infección.