* Habitantes de la Mixteca poblana temen ir a los refugios y albergues por temor a que sean detenidos y posteriormente deportados
* En el estado de Texas viven un millón 470 mil indocumentados, de los cuales 78% son mexicanos
* El próximo primero de septiembre entrará en vigor la ley antimigrante SB4
Ciro De Gante Fortoso /Especial.
Debido al huracán Harvey, la Mixteca poblana, junto con la guerrerense y la oaxaqueña, resultarán seriamente afectadas, ya que cientos de miles de migrantes mixtecos residen en esta parte de los Estados Unidos de Norteamérica y tras el paso de la tormenta tropical, tendrán que enfrentarse a serias dificultades.
De acuerdo a los especialistas en temas de migración, las afectaciones por el fenómeno meteorológico le pegará a los migrantes que viven en esa parte de la Unión Americana porque no pueden trabajar y no cuentan con recursos para subsistir, además de que por las leyes antimigrantes, temen ir a los refugios y albergues por temor a ser detenidos y deportados.
Tan solo de Izúcar de Matamoros, se calcula que son poco más de 10 mil los migrantes que viven en el valle de Texas, desde Brownsville, Macallen, en el condado de Hidalgo, Laredo, Corpus Christi, Houston y Galveston, afectados por Harvey. Y otros miles de mixtecos, incluidos de municipios del estado de Guerrero, cercanos a Puebla como Xochihuehuetlán, Huamuxtitlán, Tlapa, así como de la región de Huajuapan de León, Oaxaca, también radican de manera ilegal en esas ciudades estadounidenses, por lo que se prevé que se verán afectados por el paso de Harvey.
A la falta de empleo que el fenómeno está generando, se suma el temor de los migrantes de no acudir a los centros de ayuda por temor a que las autoridades los ubiquen y los detengan, para posteriormente ser deportados, lo que los obliga de acuerdo a testimonios de familiares de ilegales, a permanecer en sus casas que están completamente inundadas.
El temor a ser deportados no es para menos, ya que en Texas, el próximo primero de septiembre entrará en vigor la Ley SB4, que faculta a las autoridades del orden público a cuestionar el estatus migratorio de las personas detenidas por cualquier razón, pidiendo documentación que avale su estancia en aquel país, y la cual enfatiza que aquellos oficiales que no acaten la nueva legislación, serán multados o destituidos de su cargo.
Cabe señalar que de acuerdo con Migration Policy Institute, se estima que en el estado de Texas viven 1 millón 470 mil indocumentados, de los cuales 78 por ciento son mexicanos y el resto de Centroamérica. Ubicándose en varios condados.
La ley SB4 ha sido tachada de racista, pues con ella se espera identificar a inmigrantes viviendo ilegalmente en aquel estado y con ello poder deportarlos, obliga a los elementos a efectuarla, aunque ésta vaya contra sus valores, ya que si no la realizan se les aplicará una multa de entre mil y mil 500 dólares por la primera violación a la ley, y hasta 25 mil por las subsecuentes, o el despido de éstos.
¿Qué es la ley SB4?
La iniciativa fue propuesta por el Senador Republicano Charles Perry el año pasado y aprobada por el Comité de Asuntos Estatales del Senado el pasado 3 de febrero, en una sesión partidista, con siete votos a favor y dos en contra; para el 7 de mayo en el Senado de Texas se afirmó y se declaró que se efectuaría a partir del primero de septiembre.
Se trata de una medida que obligaría a las agencias estatales del orden a colaborar y cumplir con las medidas de detención de inmigrantes indocumentados del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE).
Para ello, propone permitir que los oficiales de policía pidan documentos a las personas detenidas, autorizar la cooperación entre autoridades carcelarias y servicios de inmigración, prohibir que los gobiernos eviten que sus funcionarios investiguen a inmigrantes y aprobar el recorte de fondos estatales a universidades, departamentos de policía, municipios y condados en caso de no cumplir con las medidas establecidas.
Asimismo, la propuesta daría a los ciudadanos la facultad de denunciar a cualquier institución que no coopere con los servicios de inmigración, para que esta sea sancionada.
Las afectaciones de Harvey
El estado de emergencia fue declarado en 54 condados de Texas y parte de la vecina Louisiana, donde 12 mil miembros de la guardia nacional de Texas fueron desplegados para ayudar en lasoperaciones de búsqueda y rescate mientras la Agencia Federal para la Gestión de Emergencias (FEMA), envió 8 mil 500 trabajadores federales a los dos estados.
Hasta el momento más de 3 mil personas han sido rescatadas en Houston. Unas 5 mil 500 están alojadas en refugios en la ciudad de Texas y más de 30 mil serán trasladadas a refugios temporales, según las autoridades.
El sureste de Texas y el suroeste de Louisiana se están llevando lo peor de las lluvias. El Centro Nacional de Huracanes alertó del peligro de viajar a las áreas afectadas y pidió a los conductores que eviten carreteras inundadas alertando de que la situación sigue siendo “catastrófica” y peligrosa.
Asimismo, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su mujer, Melania, llegaron ayer martes a Corpus Christi, en Texas, donde se reunieron con organizaciones de ayuda a las víctimas de la tormenta Harvey, que devastó este inmenso estado del sur.
A su paso, Harvey también causó estragos en Rockport y Corpus Christi, y el huracán, que antes de tocar tierra alcanzó la categoría 4, trajo intensos vientos y fuertes lluvias a la zona. Desde entonces, Harvey se degradó a categoría 1, pero las potentes lluvias siguen golpeando a la ciudad. Las posibles inundaciones de los próximos días, terminarán por sumarle más daños y escombros a Rockport.
El Servicio Nacional de Meteorología anunció que Harvey dejó casi 125 centímetros de lluvia en Pearland, en el sureste de Houston.
Desde que el huracán Harvey tocó tierra en la costa de Texas, varias ciudades como Houston se vieron colapsadas por la inundación que es catalogada como la más devastadora en la historia del estado texano, donde están en emergencia y que ha impedido que miles de connacionales puedan trabajar.
“Lo que estamos viendo es el evento de inundación más devastador en la historia de Houston, estamos viendo niveles de lluvia sin precedentes”. Así es como el meteorólogo Steve Bowen evaluó la situación de emergencia que vive la ciudad de Houston, la urbe más grande del estado de Texas y la cuarta del país donde la lluvia de la tormenta Harvey ha provocado serias afectaciones.
“Es una locura ver los caminos por los que se conduce todos los días completamente bajo el agua”, dijo John Travis, un habitante de la ciudad estadounidense de Houston, a las severas inundaciones en las autopistas, avenidas y calles que está provocando la tormenta Harvey a su paso por Texas.
Grandes autopistas, avenidas prncipales y calles en los barrios han quedado bajo el agua, reportó otro ciudadano y para el Servicio Meteorológico Nacional, la amplitud e intensidad de esta lluvia “está más allá de lo que se había experimentado antes”.
Los servicios pidieron a las personas en zonas inundadas que, de ser necesario, suban a los techos para que puedan ser vistos por los servicios de emergencia. El fenómeno se fortaleció hasta alcanzar la categoría de huracán 4, de un máximo de 5, y tocó tierra la media noche del viernes. Pero en esta ciudad de 2,3 millones de personas, la cuarta más grande tras Nueva York, Los Ángeles y Chicago, no fue solicitada una evacuación.