Hipólito Contreras/Huaquechula, Pue.
La Embajada de Estados Unidos en México entregó 200 mil dólares, (3 millones 762 mil 520 pesos), al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para la remodelación del ex convento de San Martín de Tours, ubicado en el municipio de Huaquechula, que sufrió daños severos por el sismo del 19 de septiembre de 2017.
El apoyo representa un monto por 4 millones de pesos, de los 80 millones que se requieren para restaurar el inmueble en su totalidad, debido a la gravedad de los daños que sufrió.
Durante el anuncio de la entrega de los recursos, en el Castillo de Chapultepec, en la ciudad de México, el antropólogo Diego Prieto Hernández denunció que las afectaciones que registró el inmueble, se debieron, en gran medida, a intervenciones “erronas” que se realizaron, como la colocación de lozas de cemento que representaron un peso adicional a las bóvedas del edificio.
“El sismo causó graves afectaciones en todo el conjunto, desde la barda trial en el claustro y principalmente en el templo, donde hubo una sección de bóveda que colapsó y provocó grandes grietas con afectaciones a todos los bienes, lo mismo los retablos, que las imágenes, en fin el conjunto resultó muy afectado. De sus cuatro cúpulas, dos de ellas tienen grietas y una colapsó parcialmente. La cúpula del campanario también colapsó y la entrada de piedra de cantera está dañada”, abundó.
Prieto Hernández explicó que las afectaciones se centraron también en la pintura mural que data del Siglo XVI. Citó el caso de una escena procesional de frailes encapuchados, “que refleja la cosmovisión de un mundo prehispánico y las creencias religiosas novohispanas”, según comentó.
Por su parte, el jefe de la cancillería John Creamer mencionó en la ceremonia que el Fondo de Embajadores para la Preservación Cultural, fue creado por el Congreso de los Estados Unidos en el 2000, por medio del cual se ha podido ayudar a más de 120 países para la preservación de sitios y objetos culturales.
“Incluso cuando el pueblo y el gobierno de los Estados Unidos contribuyeron a los esfuerzos de búsqueda y rescate, un equipo de la Embajada y de Washington comenzaron a trabajar con el INAH para ver cómo podíamos ayudar a afrontar el daño causado a los sitios culturales de México”, precisó.
Trabajos culminarán en el 2020
Los trabajos estarán a cargo del restaurador Pablo Miral Tapia, quien también realizó trabajos de gestión de recursos, y se prevé que concluyan hasta 2020, pues se dividirán en diferentes etapas.
La primera etapa ya se puso en marcha y consiste en los aplanados de las estructuras; la segunda iniciará en 2019 y se realizará un levantamiento arquitectónico y un estudio fotográfico del lugar.
La tercera etapa se efectuará también el próximo año y se llevará a cabo la “consolidación” de la pintura mural y la terminación de los elementos arquitectónicos. La cuarta y quinta fase se llevarán a cabo en 2020 y se colocarán sistemas antiplagas, ya que la pintura es afectada por las polillas que hay en el lugar, además de que se intervendrá la cubierta del patio.