Don Eliseo Morales a la muerte invocó
con una taza de chocolate la llamó
un pacto con ella creó
treinta mil le pidió
El día esperado llegó
y la catrina muy feliz se presentó
y un costal enorme le dio
el presidente municipal sonrió
Eliseo Morales se sonrojó
pues ya tendría para su fiestón
lo que no se esperó es que la catrina
puras flores les dio
El presidente municipal no para de llorar
pues se le olvidó que a la catrina cosas
certeras se le debe anunciar
por ello ni fiestón, ni dinero le dio
solo flores para que lleve al panteón.