Román Valle / Información internacional
El presidente electo de Estados Unidos Donald Trump, reiteró su plan de usar al Ejército para deportar a los migrantes que entraron de manera irregular a su país y dijo que lo hará “hasta el máximo nivel que permite la ley”.
En una entrevista realizada por la revista “TIME”, el presidente electo de Estados Unidos comento que la inmigración ilegal a su país se puede catalogar como “una invasión” y señaló que solicitaría el uso de la Guardia Nacional y de las fuerzas del orden locales para complementar los esfuerzos del Ejército en la deportación de migrantes.
Cabe mencionar que la ley estadounidense establece que no se puede usar las Fuerzas Armadas para hacer cumplir leyes nacionales sin una ley aprobada por el Congreso.
“Bueno, no, no detienen al Ejército si es una invasión a nuestro país, y yo si lo considero una invasión”, “Solo haré lo que la ley permite, pero iré hasta el máximo nivel que la ley permite. Y creo que, en muchos casos, los alguaciles y las fuerzas del orden necesitarán ayuda. También tendremos a la Guardia Nacional, e iremos tan lejos como me permitan ir, de acuerdo con las leyes de nuestro país” dijo Trump sobre las leyes que rigen el uso de los militares.
A estas declaraciones se suma el que también sugirió que podría construir nuevas instalaciones de detención para albergar a los inmigrantes, incluso mientras negocia con otras naciones para recibir a los deportados.
Cabe recalcar que nuevamente amenazó a los aliados con aranceles si no acceden a recibir a las personas expulsadas de la unión americana, de igual manera respondiendo a una pregunta sobre la posibilidad de que se construyan nuevos campamentos de detención de inmigrantes en su gobierno, Trump respondió: “Podría haber”.
Siguiendo sobre este tema Trump dijo que hará lo que sea necesario para sacarlos. “No me importa. Honestamente, lo que sea necesario para sacarlos, nuevamente lo haré absolutamente dentro de los confines de la ley”.
“Pero si se necesitan nuevos campamentos, espero que no sean demasiados porque quiero sacarlos. No quiero que estén sentados en un campamento durante los próximos 20 años”, dijo.
“Quiero que se vayan, y los países deben recibirlos, y si no los reciben, no haremos negocios con esos países, y les aplicaremos aranceles muy sustanciales, y será muy difícil para ellos hacer negocios con nosotros”, puntualizó
Finalmente, Trump reiteró su promesa de no separar familias con estatus inmigratorio mixto porque prefiere “deportarlos juntos”.
