Redacción / Izúcar de Matamoros, Pue.
Izúcar de Matamoros se encuentra de luto tras el fallecimiento del Padre Dr. Gerardo Crivelli Estefanoni, un sacerdote que dejó una huella imborrable tanto en el ámbito religioso como en el educativo. Crivelli Estefanoni, fundador de la Unidad Escolar Particular Miguel Cástulo Alatriste (UEP), falleció a la edad de 71 años, aunque hasta el momento no se han dado a conocer las causas de su deceso.
El Padre Gerardo llegó a Izúcar en 1977, un año después de haber sido ordenado sacerdote, y desde entonces se dedicó a la transformación espiritual y comunitaria de la región. Fue el artífice de la construcción de templos emblemáticos que hoy en día siguen siendo símbolos de fe y esperanza para los feligreses de la zona. Entre ellos destacan la parroquia de La Galarza, el templo del Cerrito, y la parroquia de San Martín Alchichica, en Tatetla.
Además de su labor como constructor de templos, Crivelli Estefanoni fue el creador del movimiento religioso «La Búsqueda de Cristo», el cual sigue vivo en la comunidad de Cristo Rey La Galarza, una congregación que continúa difundiendo su mensaje de amor y compromiso espiritual a las nuevas generaciones.
A lo largo de su vida, el Padre Gerardo se destacó por su vocación como formador y guía espiritual, lo que le permitió fundar la UEP Miguel Cástulo Alatriste, institución educativa que continúa su legado, brindando formación integral a los estudiantes bajo los principios que él promovió.
Aunque se retiró de su labor pastoral hace varios años, su regreso durante la pandemia de COVID-19 para celebrar un aniversario de la escuela fue un testimonio de su dedicación a la comunidad que lo vio crecer. Su legado perdurará en las generaciones que lo conocieron y en los corazones de quienes recibieron su sabiduría, guía y amor incondicional.
El Padre Gerardo Crivelli Estefanoni será recordado como un líder, un sacerdote ejemplar y un hombre de fe que dedicó su vida al servicio de los demás. Su fallecimiento deja un vacío en la comunidad, pero también el consuelo de un legado que sigue vivo en cada rincón de Izúcar de Matamoros.