Las camionetas, asegura, coinciden con los principios de la 4T
Daniel Hernández / Izúcar de Matamoros
La alcaldesa morenista de Izúcar de Matamoros, Irene Olea Torres, se olvidó de la austeridad republicana y la pobreza franciscana de la 4T, y adquirió para su uso personal una camioneta híbrida valuada en más de 800 mil pesos y dos más JAC Frison T8, cuyo precio supera los 600 mil pesos.
Luego de que fue exhibida en la sesión de cabildo por el regidor Juan Manuel Morales Lara, quien reclamó que no hubiera transparencia en el gasto de la adquisición de una camioneta que solamente ella usa, que el gasto fue excesivo y que no concordaba con los principios de austeridad de la Cuarta Transformación, la alcaldesa terminó por informar los gastos hechos en el parque vehicular.
Olea Torres señaló que destinó 7 millones 694 mil 994 pesos para la adquisición del parque vehicular para las tareas propias del ayuntamiento; sin embargo, en esa lista de vehículos incluye tres unidades de lujo, la que usa ella, que es una Toyota Highlander híbrida que tiene un costo de 835 mil 900 pesos, y dos JAC Frison T8 que, en conjunto, suman un millón 200 mil pesos.
La austera camioneta que ella conduce tiene dos motores, uno de combustión interna de 2.5 litros y otro eléctrico de imanes permanentes tipo sincrónico, una batería híbrida auto regenerativa, que se recarga al frenar, desacelerar o cuando se detiene en el tráfico, según los sitios especializados en automóviles.
Tiene techo panorámico, tres filas de asientos, caja de velocidades automatizada tipo CVT con seis cambios simulados, pantalla de 12.3 pulgadas, dos conectores USB en la segunda fila, cargador inalámbrico compatible con Android y iOS, cámara de reversa.
El volante calefactable y la palanca de velocidades están forrados en piel sintética, cámara de reversa y ocho bolsas de aire.
La alcaldesa, al final de la sesión, refutó los señalamientos y aseguró que la compra fue aprobada por los regidores durante la elaboración del presupuesto municipal y que formaba parte del parque vehicular para quienes desarrollan labores en el municipio y que asisten a las comunidades más alejadas; sin embargo, la unidad tiene características de lujo que es poco probable que sea funcional en lugares lejanos.
Aseguró que la unidad es útil para sus gestiones que tiene que hacer en la ciudad de Puebla y la Ciudad de México, sobre todo, porque, al ser híbrida, circula todos los días y no tiene problemas para la verificación.
Además de que no le gustan los problemas con la verificación, tampoco quiere foto infracciones, por lo que instaló un sistema para ocultar electrónicamente las placas, algo que está prohibido por el reglamento de tránsito y que Enlace Noticias pudo constatar en fotografías hechas llegar por ciudadanos cansados de los excesos de la alcaldesa.
La estrategia le ha funcionado, ya que la camioneta no tiene registros de infracciones en la página del Monitor Vial.
La alcaldesa aseguró que la compra de la camioneta no traspasa los principios de la 4T:
“Este gobierno, regidor, no vulnera los principios de la Cuarta Transformación; le solicitó esa parte de responsabilidad a la hora de emitir un juicio. Somos plenamente conscientes de que la inversión pública debe dirigirse a las comunidades con mayor rezago social, y así lo hemos hecho”.