En la Capital Poblana, una mujer llamo al número de emergencia 911 para solicitar que las autoridades retiraran de las inmediaciones de una iglesia a dos hombres que se abrazaban.
Segundos antes de llamar al número de emergencia roció a los dos jóvenes con un atomizador que incluía agua bendita, aunque ambos intentaron dialogar con ella y explicarle que no estaban incurriendo en ningún delito o falta administrativa, aun así, llamó a los servicios de emergencia para solicitar apoyo. “Malo es robar, malo es odiar, señora” menciono uno de los agredidos.
Una vez se realizó la llamada la señora los acuso de llevar a cabo actos inmorales y los acuso de ser migrantes que venían a corromper a la sociedad con sus malas prácticas.
En la grabación viral, se pudo ver que otro joven se acercó y trató de defender a la pareja, pero ningún argumento disuadió a la mujer, quien insistió en que ellos tenían que retirarse por estar “en la casa de Dios”.