Noemí Bautista / Puebla, Pue.
Por fin se dio inicio a la temporada de uno de los platillos favoritos de todos los mexicanos, no solo por su sabor, sino también porque representa los colores de nuestro país, me refiero al “Chile en Nogada”, el cual ya se puede degustar en el municipio de Calpan.
Desde el pasado fin de semana, en esa demarcación, ubicada en las faldas de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl, comenzó la venta del Chile en Nogada con un precio inicial de 230 a 250 pesos, tarifa que ya registra un aumento, aunque se pronostica siga al alza.
Una de las expositoras dio a conocer que el costo se debe al alto precio de los frutos protagónicos que incluye la receta original, como son la nuez de castilla, el durazno y la pera lechera; tan solo el kilogramo de nuez limpia está en 800 pesos y un bote de durazno en 400 pesos, cuando el año pasado costaban cien o doscientos pesos menos, es decir, registró un aumento de más del 50%.
Mencionó que no descartan que aumente más, pero esto dependerá del precio de los insumos y de los frutos que se utilizan en su preparación; además, las lluvias y granizadas afectaron los cultivos de los árboles frutales y del chile poblano, por lo cual existe el riesgo del incremento del valor del platillo.
Oficialmente comienza en julio
La Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC), dio a conocer que de manera oficial la temporada del “Chile en Nogada” dará inicio el próximo 21 de julio, con la venta de este platillo en los distintos restaurantes y negocios de comida de Puebla.
Prevén que se vendan alrededor de tres millones de platillos del Chile en Nogada durante la temporada 2022 que finalizará en el mes de septiembre, aunque la Cámara asegura que su costo promedio oscilará en los 150 pesos, debido a que los productos base mantendrán su costo este año, contrario a lo que dicen los habitantes de Calpan.
Todos los domingos del mes de agosto, en los barrios tradicionales y de diversas zonas de la ciudad, y de todo el estado, se lleva a cabo el festival, donde se muestra la riqueza y la exquisita gastronomía de Puebla, acompañado de exposiciones, eventos de arte y mucho más.
Historia del “Chile en Nogada”
La versión más popular dice que este platillo fue creado por las monjas agustinas del convento de Santa Mónica en Puebla, para celebra la Independencia de México y como un homenaje a don Agustín de Iturbide, aprovechando los productos de temporada como la granada y la nuez de castilla; estas religiosas prepararon un alimento que mostraba los colores patrios: verde, blanco y rojo, una composición que luego se convirtió en uno de los platillos más representativos de México.
Otra interpretación más romántica, está descrita por el famoso escritor Artemio de Valle-Arizpe. Él relata que en el Ejército Trigarante existían tres soldados cuyas novias vivían en Puebla. Emocionadas por la Independencia y por tener de vuelta a sus enamorados, decidieron crear este platillo para festejarlo. Cada una eligió un ingrediente que representara el color del Ejército, lo que dio como resultado el platillo que ha trascendido a nivel internacional.
Derrama económica en la entidad
En los meses de junio, julio, agosto y septiembre, más de 15 mil negocios venderán este platillo o productos relacionados con este, lo que representa una gran derrama económica en el estado. Durante la temporada del “Chile en Nogada” se realizan ferias, las más famosas son las que se organizan en los municipios de San Nicolás de los Ranchos y San Andrés Calpan, ubicados en la zona de los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl.
Para preparar el famoso “Chile en Nogada” se necesita durazno, pera, manzana, nuez de castilla, chile poblano y granada, los cuales se producen en la zona del Izta-Popo, además de otros ingredientes que incluye el platillo.
Con la finalidad de generar más variedad, los negocios diversificaron los productos que se realizan como complemento al Chile en Nogada; entre ellos pizzas, helados, tortas, cemitas, mermelada, pay, pastel y donas, por mencionar algunos, mismos que pueden degustar los comensales en los diferentes establecimientos de comida.