A partir del próximo 16 de mayo de 2022, aeropuertos y aviones de la Unión Europea dejarán de solicitar el uso de cubrebocas, en respuesta a una disminución de contagios por Covid-19.
Esta medida incluye, sin embargo, una excepción, la mascarilla seguirá siendo obligatoria en los vuelos que comiencen o finalicen en destinos donde sí se utiliza en el transporte público.
La actualización del Protocolo conjunto de Seguridad Sanitaria en la Aviación tiene en cuenta la situación actual en relación a la pandemia, en particular los niveles de vacunación y de inmunidad adquirida de forma natural, señalaron las organizaciones en un comunicado.
En vista de ésta, es posible comenzar a relajar las restricciones en vigor en lo que respecta al tráfico aéreo, lo que ayudará a aliviar la carga que éstas suponen para el sector.