El estado de Puebla ha experimentado una disminución en el número de defunciones de mujeres embarazadas en lo que va del año. Según datos de la Secretaría de Salud federal, hasta ahora se han registrado 24 muertes, en comparación con las 32 del mismo período del año pasado. Esta tendencia también se ha observado a nivel nacional, donde se han reportado 436 muertes de mujeres embarazadas, en comparación con las 538 del año pasado.
De las defunciones en Puebla, el 70.83% ocurrió en servicios de salud estatales, mientras que dos se registraron en clínicas del IMSS y cinco mujeres no recibieron atención médica. Sin embargo, Puebla ya no se encuentra entre los primeros cinco lugares en cuanto al número de muertes maternas, siendo superado por el Estado de México, Veracruz, Chiapas, Guerrero y Chihuahua.
En términos de causas de muerte, las principales son la hemorragia obstétrica (20.9%), enfermedad hipertensiva, edema y proteinuria en el embarazo, el parto y el puerperio (15.6%), aborto (8.0%) y complicaciones del embarazo, parto y puerperio (6.7%).
En 2022, Puebla cerró el año con 36 defunciones maternas. Estos casos se registraron en diferentes municipios, como Guadalupe, Teolocholco, Teziutlán, Chignautla, Puebla, Naucalpan, Acatzingo, San Pedro Cholula, Chiautzingo, Palmar de Bravo, Acajete, Cuetzalan, San Martín Texmelucan, Huejotzingo, Tlatlauquitepec, Chiautla de Tapia, Huauchinango, Chignahuapan, Teopantlán, Ixtacamaxtitlán, Olintla, Tepeaca, Huehuetla y Tepemaxalco.
A pesar de la disminución en el número de defunciones, es importante seguir trabajando para reducir aún más estas cifras y garantizar una atención adecuada para las mujeres embarazadas en Puebla. La atención médica oportuna y de calidad es fundamental para prevenir complicaciones y salvar vidas.