Abraham Onofre/ Nacional.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México ha notificado a Jesús Abid «N» una nueva orden de aprehensión en su contra por el delito de tentativa de homicidio. El sujeto es conocido por haber atacado, junto con su pareja, a una maestra de kínder en el municipio de Cuautitlán Izcalli.
Por si fuera poco, ayer un juez en el Estado de México determinó vincularlo a proceso por el delito de extorsión, y hoy enfrenta una nueva orden de aprensión por un segundo delito. El menor de nombre Christopher «N» todavía no ha sido entregado a sus abuelos paternos, quienes aseguran contar con un amparo.
Además, aún no se ha determinado si habrá indagatoria con respecto al maltrato animal que ejercía el sujeto y que se dio a conocer en redes sociales. Pero las sorpresas no terminan ahí, ya que se abrió la posibilidad de que la directora del plantel, Norma Velázquez, enfrente cargos penales.
El abogado del pequeño Christopher aseguró que iniciaría acciones legales en contra de Velázquez por una aparente vulneración a la confidencialidad. Cuestionó la manera en que la grabación del ataque perpetrado por Jesús Abid «N» y Laura «N» llegó a redes sociales, dado que fue captada por las cámaras de vigilancia de la institución educativa. La defensa legal podría presentar cargos en contra de la directora por la filtración del material.
En una entrevista, la directora del kínder detalló que el día de la agresión ella estaba en su oficina tomando una asesoría del Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad con la intención, precisamente, de evitar este tipo de incidentes. Según sus declaraciones, Christopher llevaba alrededor de seis meses inscrito en el colegio, periodo durante el cual la institución no recibió ninguna queja por parte de Jesús «N» y Laura «N» sobre malos tratos en contra del menor.
Respecto a Brenda «N» y Roselia «N», Velázquez aseguró que se inició un proceso de acompañamiento psicológico para subsanar el impacto emocional de la agresión. En una audiencia inicial efectuada el 21 de julio, el Ministerio Público formuló la imputación contra los presuntos agresores y, tras el intercambio de alegatos, un juez de control ordenó prisión preventiva justificada contra la pareja, pues consideró que había un riesgo de que buscaran evadir a la justicia.
La comunidad del Estado de México se mantiene a la expectativa de nuevas revelaciones en este caso, que ha generado una gran indignación y una fuerte reacción en todo el país.