Tras varios días de búsqueda y presión, las autoridades mexicanas localizaron a los cuatro ciudadanos estadounidenses desaparecidos el viernes en Matamoros, Tamaulipas. Dos están muertos, otro malherido y un cuarto en buen estado.
La noticia fue confirmada por el presidente de la república Andrés Manuel López Obrador, quien plena mañanera recibió la llamada del gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, quien le dio la información.
Por su parte la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, ha informado de que hay un detenido y se espera se pueda dar con los demás involucrados, así como esclarecer el móvil del hecho.
Desde este lunes, la Casa Blanca se había referido al asunto, calificándolo de inaceptable. El domingo, además, el FBI había divulgado un comunicado, en el que ofrecía una recompensa de 50.000 dólares por pistas que pudieran llevar a su paradero.
El Fiscal de Tamaulipas ha informado de que los dos supervivientes han sido entregados al FBI en el puente internacional que une Matamoros con Brownsville, Texas.
Villarreal detalló de que los cautivos fueron rescatados en una caseta de madera, a las afueras de Matamoros, cerca de Playa Bagdad