Sobre el contexto, en el cual surge el conocimiento de frontera, a continuación, en la segunda parte de éstas reflexiones, se puede ilustrar con el siguiente ejemplo.
Tomando en cuenta, a su vez, que en un mundo donde se busca la justicia, la Constitución está por encima de la ley y no al revés, papel que asume AMLO, al pretender imponer una reforma electoral conocida como plan “B”, una ley ordinaria, que se pretende imponer por encima de la Constitución, lo que evidentemente corresponde a un modelo de Estado dogmático, legislativo, autoritario y positivista, inspirado en la época de la modernidad conocida como “el imperio de la ley”, basado en el principio de “dura lex sed lex” (“la ley es dura pero es la ley”), entendiendo al positivismo como un concepto de lo “impuesto”, por un gobernante autoritario o dictador, modelo cuyo fracaso se dio de manera contundente, con la derrota de Hitler, en la segunda guerra mundial, que costó a la humanidad más de 88 millones de muertos; y de cuya experiencia trágica, surge con todo ímpetu la lucha por construir para esta época, un nuevo modelo constitucional y democrático de derecho, cuyo propósito central es la lucha por la justicia, la Constitución por encima de la ley; por un modelo cuyo ideal se basa en: “la fuerza de la razón”, frente a “la razón de la fuerza”.
Por estas razones me ha llamado mucho la atención, la columna mencionada del Dr. Lozano, al utilizar el concepto de frontera, aplicado a una persona que no tiene conocimientos de frontera, para tener esta clase de conocimiento, se requiere a su vez de un conocimiento más amplio, en donde se cruzan las ciencias sociales y se mezclan (el sincretismo). Por ejemplo, la heurística, como parte de la filosofía, pone como elemento central al ser humano y nos enseña que si no cambia el ser humano, no cambia nada; para que cambie la economía, la política, la cultura, el ser humano necesita cambiar primero él. Así la heurística, se convierte en una ciencia, que habla incluso de aquello que no existe. Ese es el conocimiento frontera.
En la economía, ser visionario, innovador, portador de la ciencia, la tecnología, para poder competir en un mundo de globalización, requería, con la visita de Biden y Trudeau, comprender un esfuerzo conjunto de integración económica con México. Ya que esa cumbre, no era con América Latina, era directamente de Estados Unidos y Canadá con México, porque con el TMEC, se están integrando. La palabra integración quiere decir que a México, lleguen todas las inversiones que sean posibles, de los más de 500 mil millones de dólares, que año con año, Estados Unidos invierte en China, lo que Ahora Biden está ofreciendo a México; y pues para eso, si necesitamos un Presidente con un conocimiento de frontera.
Lamentablemente López Obrador está en el pasado, debería tener como punto de partida y como punto de llegada el futuro, ser un hombre permisivo, que permita otras opiniones, ser un hombre democrático, innovador, analítico, que descompone el todo en sus partes, que tiene una visión hermenéutica, que comprende el todo de un golpe y ese pensamiento es cosmopolita, o sea, un homo universitates, un hombre que reconoce que “existe en la medida en que existen los demás y que advierte que la vida humana es coexistencia social” (hhttps://prezi.com homo universitates), posee un conocimiento científico vasto, donde se cruzan todas las hipótesis de la economía, la política, el derecho, que es respetuoso de los derechos humanos.
Que entiende que después de la segunda guerra mundial, con el fracaso de Hitler y con más de 88 millones de muertos, el ser humano está por encima de todo; y uno de los derechos humanos fundamentales, es la protección del medio ambiente, que no haya energías sucias, fósiles; y AMLO es partidario del combustóleo, de ese chapopote, para que funcionen la Comisión Federal de Electricidad (CFE), para construir su refinería y entonces darle preferencia al petróleo fósil, al combustóleo y estar en contra de las energías limpias, de la solar, eólica, es francamente lamentable; por lo que no veo cuál conocimiento de frontera pudiera tener el Presidente AMLO, como lo juzga el Doctor Lozano.
En la Cumbre mencionada con Biden y Trudeau, era para impulsar las inversiones y AMLO no tiene visión global, del peso de las inversiones, él no está inmerso en esas temáticas de frontera, para ello necesita un modelo de Estado, de Poder, democrático, constitucional, respetuoso de los derechos humanos.
Es decir apunta hacia una forma de Estado y de gobierno, inspirado en el viejo positivismo, más atrás incluso de Porfirio Díaz. El positivismo clásico quiere decir lo impuesto, lo autoritario, una sola voz, AMLO solo cree en un mundo unívoco, de una sola voz (estás conmigo o está contra mí); para hablar de un gobernante de frontera, tendría que ser polisémico, con un conocimiento diverso, donde no existe una sola voz, existen muchas voces y entre todas esas voces se construye una voz común, un sentido común, basado en la hermenéutica, que quiere decir, en la comprensión del mundo mediante la interpretación.
AMLO está completamente en contra de las energías limpias, es decir, su modelo económico no tiene ninguna posibilidad de salir adelante, entonces si me preocupa hablar de que López Obrador tiene un pensamiento de frontera, ya que para ello, necesitaría tener, para empezar, estudios por lo menos, como tiene Melitón que es Doctor en Educación, pero AMLO a gatas terminó su licenciatura. Entonces si es preocupante, que alguien lo considere, como un Presidente de frontera, más bien creer en ello; es como decía el gran luchador social de las tres Mixtecas: poblana, oaxaqueña y guerrerense, el Profesor Othón Salazar Ramírez, es encaminarnos hacia “el desbarrancadero”.
Por cierto el analista económico de “el financiero”, Enrique Quintana, en su columna del 25 de enero de 2023, nos recuerda, que en el futuro a nivel global, la innovación será cada vez más la base de la productividad; esa productividad, que hace más de tres décadas impulsara en China, Deng Xiaoping, autor de un dicho con mucho significado: “no importa de que color sea el gato, lo importante es que cace ratones”; pero que ahora el actual modelo de Estado autoritario y autocrático chino, mediante el control de sectores cruciales de la economía, está eliminando a la innovación, lo que puede llevar a China a un retroceso. Riesgo en el que se encuentra México con la presencia de un personaje, partidario del positivismo (de lo impuesto), autoritario y dogmático, como AMLO, que está matando también a la innovación y nos quiere llevar a un mundo de regresión.