Josué Escudero / Ciudad de México.
La reforma a la Guardia Nacional vino a fracturar la relación de los partidos que integran la coalición “Va por México”, y es que las declaraciones de los líderes de los tres grupos políticos, demuestran una debilidad que va favoreciendo a Morena.
La propuesta de la diputada priísta Yolanda de la Torre, por ampliar la participación del Ejército en la Guardia Nacional por cuatro años adicionales para un total de nueve años, fue la alerta en las dirigencias del PAN y el PRD, que advirtieron el rompimiento de la alianza.
Tanto los panistas como los perredistas señalaron que el tricolor faltó a su palabra con la coalición, así como con los compromisos que se firmaron, lo que deja en evidencia “que les dieron la espalda a las y los ciudadanos que en las elecciones de 2021 votaron por ellos”.
Asimismo, sentenciaron que se trata de una reforma “condenable” en el fondo y la forma, principalmente porque proviene de una traición por parte del PRI en complicidad con Morena, grupo que está en el poder.
Los partidos solicitaron a la Cámara de Senadores, incluyendo a la bancada del PRI, que se ha mostrado distante de las decisiones tomadas en San Lázaro, que frenen la iniciativa, pues calificaron a las modificaciones como “militaristas” que dañan la democracia y el respeto a los derechos humanos.
Las direcciones nacionales de los partidos PAN y PRD afirmaron que esperarán a que termine el proceso legislativo de la reforma, que amplía hasta 2028 las tareas de seguridad de las Fuerzas Armadas en labores de seguridad, para fijar una postura final sobre la coalición opositora “Va por México”.