El Santo Niño Cieguito, es una de las imágenes religiosas más veneradas en Puebla, y a quien le atribuyen milagros en la cura de la vista y otras enfermedades. Por lo cual cada 10 de agosto cientos de feligreses se reúnen en la Iglesia de las Capuchinas o Templo Conventual de San Joaquín y Santa Ana ubicado en el corazón de la ciudad de Puebla, en donde se encuentra su imagen.
Esta imagen del siglo XVIII está envuelta en una leyenda que, como suele suceder en estos casos, tiene varias versiones: la más difundida habal sobre un ladrón.
Según estas leyendas, esto sucedió el 10 de agosto de 1744 en el convento de la Merced de la ciudad de Valladolid (hoy Morelia) en el estado de Michoacán. Debido a que el patrón del templo anexo era San Lorenzo, después de las festividades en honor al Santo se desató una tormenta. El hombre “falto de fe” se guareció dentro del templo y al estar dentro comenzó a atacar a las imágenes, en especial la de Nuestra Señora de la Merced a la que arrebató el Niño Jesús de los brazos. Huyó con él a las afueras de la ciudad, donde furioso, comenzó a desmembrar la imagen, quitándole piernas y brazos, por lo que la imagen del Niño comenzó a derramar lágrimas de sangre.
Esto aumentó la ira del hombre quien, con el punzón que sostenía la imagen a la Virgen, le arrancó los ojos dejándole las cuencas vacías. Esto no detuvo el llanto, por lo que le dio 33 puñaladas y decidió abandonarlo entre piedras en el cerro de Punjuato.
Otra versión cuneta que un hombre encontró la figura del Niño Dios, y al verlo, decidió quitarle los ojos con una daga, ya que creía que eran esmeraldas. Tras ello, la escultura comenzó a sangrar, por lo que esta persona enterró la figura hasta que un indígena lo encontró y llevó a un templo.
También se narra que la imagen católica le perteneció a una monja de Morelia, pero llegó a Puebla como regalo a un sacerdote que estaba a cargo del templo de Las Capuchinas.
Ante su altar, los católicos le piden por la salud de los niños, pero en especial, es considerado como el patrono de las personas con debilidad visual.