** Las panaderías y distribuidores ponen sus esperanzas de reactivación económica en la venta de estos productos **
Elizabeth Soriano / Izúcar de Matamoros, Pue.
Fotos: Josué Escudero
A tan solo unas horas de que los Reyes Magos visiten miles de hogares izucarenses, panaderías y vendedores de pan ya iniciaron con la venta de rosca de Reyes, con gran diversidad de precios al alcance de la economía de las familias, siendo que este año si se podrá celebrar en escuelas, oficinas, entre amigos y entre los integrantes de las familias, acompañada con un vaso de chocolate caliente, refresco, café o atole.
Esta actividad de comercio es parte de la reactivación económica que se ha impulsado desde el gobierno del estado, el cual pretende continuar con las actividades que incentiven la economía, por ello las roscas ya se ofertan en la zona centro y sus barrios y colonias, además de sus juntas auxiliares.
Las piezas ya las pueden encontrar en diversos tamaños, desde una pequeña para una o dos personas, hasta una jumbo para toda la familia; los precios pueden variar dependiendo el tamaño, van desde 50, hasta 300 pesos la más grande.
Los puntos de venta se encuentran a las afueras del mercado Miguel Cástulo de Alatriste y en el callejón que va hacia el Parque Pavón, en el centro de Izúcar de Matamoros, en ellos estarán preparados los vendedores para comercializar por pedidos y exhibición.
Cabe destacar que la rosca de Reyes es elaborada con masa dulce, adornada con rodajas de frutos secos o cristalizados y con figuras que representan al Niño Jesús escondidas dentro de la masa.
De acuerdo con su origen, la Rosca de Reyes simboliza la búsqueda de los Reyes Magos para encontrar al Niño Jesús por lo que su forma representa una corona como la que utilizaban Melchor, Gaspar y Baltazar. Aunque también se asocia al amor eterno de Dios, que no tiene principio ni fin.
Los frutos secos y cristalizados simulan las joyas incrustadas de las coronas de los Reyes Magos, aunque algunos lo interpretan como los obstáculos para encontrar al Niño Jesús.
Por último, las figuras de plástico o cerámica escondidas dentro de la rosca simbolizan al Niño Jesús y el momento en que la Virgen María y José lo ocultan para salvarlo del Rey Herodes.