Elizabeth Soriano / Izúcar de Matamoros, Pue.
El 29 de septiembre de cada año, los feligreses católicos celebran a San Miguel, uno de los siete arcángeles, el cual la iglesia le da el más alto lugar y le llama “Príncipe de los espíritus celestiales” o “Cabeza de la Milicia Celestial”; por ello es común que las puertas de casas, automóviles, trasporte público o campos se pinten de amarillo con las tradicionales cruces de flor de pericón.
En el municipio de Izúcar de Matamoros es una tradición muy presente, pues desde días atrás comerciantes de municipios aledaños o inclusive del estado de Morelos empiezan a comercializar la flor para que las personas puedan colocar sus cruces, en sus viviendas y distintos lugares como sus campos de cultivo, con la creencia de que el demonio no entre a sus hogares o a sus vidas.
De acuerdo con las creencias, se dice que desde el 28 de septiembre el demonio anda suelto, por lo que la cruz de perico permite proteger del mal el lugar donde esta puesta.
Muchos campesinos también tienen la costumbre de rodear de cruces de dicha flor de esquina a esquina y en el centro se entierra una cruz más grande, esto por la creencia de que durante el combate entre Lucifer y el Arcángel San Miguel, el diablo desata su furia y se introduce en los cultivos de maíz trayendo cómo consecuencia la destrucción de plantíos.
Para el amanecer del 29 de septiembre, San Miguel Arcángel derrama bendiciones sobre los cultivos adornados cuando triunfa el bien sobre el mal.
Por ello, en Izúcar se ve muy activa esta tradición con la presencia de comerciantes vendiendo la flor en distintos puntos del municipio, principalmente en el centro de la ciudad; además, como apoyo a su economía y para poner dificultades a los comerciantes, el Ayuntamiento de Izúcar ha tomado la iniciativa de no cobrarles por su venta, con el propósito de que su ganancia sea mayor.
Los precios en las cruces de tamaño regular van desde 15 pesos y las chicas están a 2 por 15 pesos; y si quieren comprar por manojo para ustedes hacer su propia cruz, están de 10 a 20 pesos, precios económicos y sobre todo que apoyan la economía local.
Cabe destacar que la flor de pericón es una planta silvestre que ha sido usada por antepasados para ahuyentar las malas energías como lo eran el miedo, el espanto, o el mal de ojo, además de que también es usada para aliviar trastornos digestivos, calmar los cólicos estomacales, diarrea, disentería, empacho, tifoidea y vómito.