Enrique Castillo / Chietla, Pue.
En la parroquia de San Francisco ubicada en la cabecera de Chietla, como en muchos otros lugares, el día 22 de noviembre, se celebró a la patrona de los músicos, Santa Cecilia, cuya devoción es de los grupos musicales, como son: mariachis, orquestas, norteños, tríos, cantantes y sonideros y todos aquellos que tienen que ver con la música.
Historia de Santa Cecilia
La historia de esta santa, se remonta entre los años 180 y 230 en Roma. Ella fue una noble romana, convertida al cristianismo y martirizada por su fe, cuya fecha de su muerte fue 22 de noviembre de 230, de ahí nace la celebración de esta fecha.
Y fue hasta el año de 1594 cuando el papa Gregorio XIII asignó a la joven romana como referente de la música, ya que mientras los músicos tocaban, ella cantaba con su corazón a Dios.
Debe hacerse mención que era integrante de una familia noble de Roma. Solía hacer penitencias y consagró su pureza a Dios, sin embargo, su padre la casó con un joven llamado Valeriano.
Cuando los recién casados se encontraban en la habitación, Cecilia le dijo a Valeriano: “Tengo que comunicarte un secreto. Has de saber que un ángel del Señor vela por mí. Si me tocas como si fuera yo tu esposa, el ángel no permitirá y podrías sufrir consecuencias; en cambio sí me respetas, el ángel te cuidara como me cuida a mí”.
El esposo le pidió que le mostrara al ángel y que haría lo que ella le pidiera, por lo que Cecilia le dijo que si él creía en el Dios vivo y verdadero, y recibía el bautismo, entonces vería al ángel. Valeriano fue a buscar al Obispo Urbano, quien lo instruyó en la fe y lo bautizó.
La tradición señala que cuando el esposo regresó a ver a su amada, vio a un ángel de pie junto a Cecilia y el ser celestial puso una guirnalda de rosas y lirios sobre la cabeza de ambos.
Por otra parte, el señor Enrique Amigon Fuentes, mayordomo actual de las festividades de Santa Cecilia, mencionó que esta devoción de festejarle su día, se viene realizando por su familia, desde que su papá tenía la sonora “Los Kuricaveris”.
Hace mención con lágrimas en los ojos, por la emoción y la devoción, que pasó muchos sacrificios para poder tener la imagen de Santa Cecilia, desde una deuda sobre su pensión, hasta pedir prestado para poder obtener esta imagen de bulto que se venera en la parroquia de Chietla, y es única en la región, ya que en todas las parroquias solo la tiene en fotografías.
Cabe hacer mención que el vestido que actualmente tiene puesto, fue donado por la señora Georgina Amigon Fuentes, ya que desde el año pasado deseo regalarle esta indumentaria, que hoy luce en su día.