En el estado de Puebla no existe una regulación para evitar las extorsiones y explotación de las mujeres que son victimas para laborar como sexoservidoras.
Apenas esta semana mujeres en la capital plantearon la delimitación de una zona de tolerancia para esta actividad, sin embargo, el ayuntamiento de Puebla se pronunció en contra y sostuvo que el Congreso local y el gobierno estatal deben regularla y que los municipios reformen sus Códigos Reglamentarios.
Las sexoservidoras de Acatlán de Osorio trabajan bajo un clima de inseguridad, pues en esta región sólo cuentan con el apoyo de la Unidad Básica de Rehabilitación, donde se les expide una constancia avalando que se encuentran bien de salud.
Patzy expresó que ella se inició desde los 18 años en este oficio y actualmente tiene 3 hijos, por lo que le gustaría que hubiese una regulación que le brinde seguridad, ante la violencia a la que son sometidas quienes viven del sexo servicio.
Las sexoservidoras han optado por realizar su trabajo de manera independiente y no ha surgido hasta el momento algún grupo u organización que las represente, por lo que ninguna autoridad destina recursos o apoyos a las y los sexoservidores.
Otros municipios que se encuentran en la misma situación son Huauchinango, Teziutlán y Zacapoaxtla.