-Atacan a balazos a padre e hijo que viajaban en una motocicleta

Abraham Onofre / Atzala, Puebla.

La tarde del viernes 3 de octubre, un doble ataque armado en la carretera que conecta el Crucero de Colón con el municipio de Atzala dejó un saldo de una persona muerta y otra herida. Gerardo N., de 38 años, conocido localmente como “El Toro”, perdió la vida en el lugar del hecho tras recibir varios impactos de bala, mientras que su hijo Jorge N., de 18 años, resultó con una herida en el pie y fue trasladado de emergencia al Hospital General de Izúcar de Matamoros.

De acuerdo con un reporte preliminar recibido a las 15:00 horas, un ciudadano alertó sobre la presencia de un hombre lesionado sobre la carpeta asfáltica. Al arribar al sitio, los primeros respondientes hallaron a Gerardo N. boca abajo, vestido con gorra negra con detalles azules, camiseta blanca, pantalón cargo verde y tenis negros. A pocos metros, yacía una motocicleta Honda gris con placas de Oaxaca (MCR2C), aparentemente el vehículo en el que se desplazaban padre e hijo.

Testimonios recabados de forma extraoficial apuntan a que el ataque fue ejecutado desde un automóvil en movimiento, lo que sugiere una emboscada planificada. Aunque no se ha confirmado oficialmente el móvil, fuentes cercanas a la investigación señalan que podría tratarse de un acto de venganza.

Durante el levantamiento del escenario, peritos localizaron tres casquillos percutidos de color dorado distribuidos a distintas distancias del cuerpo: uno a 12 metros, otro a 20 metros y un tercero, aparentemente deformado, a 50 metros. Estos elementos serán analizados como parte de la Carpeta de Investigación que abrirá la Fiscalía General del Estado de Puebla.

Mientras tanto, un operativo de búsqueda en los campos aledaños permitió localizar al joven Jorge N. a las 15:55 horas. Presentaba una lesión por arma de fuego en el pie, por lo que fue evacuado de inmediato en una ambulancia del Servicio de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA).

El cadáver de Gerardo N. fue trasladado al anfiteatro de Izúcar de Matamoros, donde se le practicará la necropsia de ley para determinar las causas exactas de la muerte y recolectar evidencia forense. Hasta el cierre de esta edición, las autoridades no han reportado la detención de ningún sospechoso.