La Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió una recomendaciones al director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Tuffic Miguel Ortega, por dos casos de inadecuada atención médica que provocaron la pérdida permanente de la vista de dos niños.
Uno de los casos ocurrió en el Hospital General de Zona 8, de Uruapan, Michoacán, y el otro en el Hospital de Especialidades Número 2, de Ciudad Obregón, Sonora.
En el primero de ellos, la falta de diagnóstico y tratamiento oportuno de una retinopatía ocasionaron que dicho padecimiento evolucionara, lo que a su vez provocó al paciente la pérdida permanente de la vista.
En el caso de Sonora, el expediente indica que el médico que atendió a un bebé extirpó el ojo derecho al agraviado en lugar del izquierdo en que presentaba cáncer; se le extrajo el ojo con malignidad y perdió la vista de manera permanente e irreversible.
Derivado del análisis de las evidencias contenidas en los expedientes respectivos, la CNDH acreditó que, en ambos casos, los médicos tratantes violentaron los derechos humanos a la protección de la salud y a la integridad física, así como el principio del interés superior de la niñez
La CNDH recomendó al director del IMSS que se reparen integralmente los daños en ambos casos, que incluyen compensación y/o indemnización justa, debida y oportuna, además de la debida atención psicológica.
Solicitó la inscripción de los dos menores de edad en el Registro Nacional de Víctimas para que accedan, conforme a Derecho, al Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral previsto en la Ley.
El IMSS deberá proporcionar atención permanente que incluya tratamientos, medicamentos y terapias para que puedan desarrollar en un futuro habilidades que les permitan llevar una vida independiente y digna.
(Con información de Radio Formula)