Juan Rubio / Chietla, Pue.
Galdino Alvarado Rodríguez, secretario general de la Confederación Nacional Campesina (CNC), a través de una entrevista compartió su visión sobre el impacto de las lluvias en los productores de caña, y la necesidad de hacer frente al crecimiento de la maleza.
Las precipitaciones han sido una bendición para los agricultores de la vara dulce, ya que han impulsado el crecimiento de las plantas. Sin embargo, también han generado un desafío adicional: el aumento de la maleza.
Alvarado Rodríguez explicó: «El agua es un recurso vital tanto para los seres humanos como para los cultivos y las malezas. Si bien el agua es fundamental para el desarrollo de los cultivos de caña, también favorece el crecimiento de los matorrales».
El secretario general de la CNC enfatizó la importancia de que los productores estén atentos a sus parcelas, y realicen aplicaciones de herbicidas a tiempo, para evitar pérdidas en el rendimiento debido a la maleza. «Si no se atiende correctamente, podríamos experimentar pérdidas considerables. La maleza puede ser mucho más agresiva que el propio cultivo de la caña de azúcar», advirtió.
El problema radica en que tanto la maleza como el cultivo de la caña de azúcar absorben los nutrientes aplicados al suelo. No obstante, la maleza tiende a aprovechar más nutrientes que el cultivo, lo cual afecta directamente el rendimiento en el campo. Para evitar esta situación, Galdino Alvarado insta a los productores a prestar atención constante a sus campos, y a llevar a cabo las labores culturales de manera oportuna.
En cuanto a las consecuencias de no atender adecuadamente las parcelas y permitir el crecimiento descontrolado de la maleza, destacó las pérdidas tanto económicas como productivas. «Cuando la maleza supera al cultivo, disminuye el rendimiento y se desperdician recursos naturales que, además, no tienen ningún costo para nosotros», puntualizó.
El secretario general de la CNC resaltó la temporalidad de las lluvias actuales y su importancia para los productores de caña. «Es fundamental aprovechar este recurso natural mientras lo tenemos disponible. No podemos permitir que la maleza se convierta en un obstáculo para el éxito de nuestros cultivos», subrayó Alvarado Rodríguez.
En conclusión, las lluvias han traído beneficios y desafíos para los productores de caña. Si bien el agua es esencial para el desarrollo de los cultivos, también estimula el crecimiento de la maleza. Conscientes de esta situación, la CNC insta a los productores a mantenerse atentos y a realizar las labores necesarias, para evitar pérdidas y aprovechar al máximo los recursos naturales disponibles.