Celebración patronal reúne a la comunidad en una noche de tradición y alegría.
Andrés Martínez / Izúcar de Matamoros, Pue.
CHIETLA.— Con una vibrante muestra de folklore y gastronomía, la Gran Kermes Mexicana iluminó hoy el zócalo de Chietla en honor a San Agustín. El evento, que dio inicio a las 6 de la tarde del sábado 6 de septiembre, se erigió como el corazón de las festividades patronales, convocando a una multitud de familias en un ambiente de profunda convivencia.
Desde el comienzo, la plaza se vio colmada de puestos que ofrecían una amplia variedad de delicias: desde antojitos mexicanos y chicharrones preparados hasta dulces tradicionales, sin faltar opciones para todos los gustos como pizza y frappes. El aroma de la comida callejera se mezcló con la música y las risas, creando una atmósfera festiva auténtica.
El programa de actividades mantuvo un ritmo constante de entretenimiento. El escenario principal fue ocupado por coloridos bailes folklóricos que hicieron honor a la riqueza cultural de la región, seguidos por dinámicas interactivas que involucraron al público. Actos de imitadores de artistas conocidos añadieron un toque de modernidad al festejo tradicional, mientras que niños y adultos participaron por igual en juegos tradicionales que revivieron las costumbres locales.
El verdadero protagonista de la noche fue el espíritu comunitario. Familias enteras compartieron mesas, conversaron y disfrutaron de la velada en un ejemplo palpable de unidad y alegría colectiva. La kermes no fue solo un evento de entretenimiento, sino un reflejo del tejido social de Chietla, donde la solidaridad y la armonía fueron sensaciones palpables.
La exitosa velada reforzó el valor de las tradiciones locales y demostró cómo estas festividades actúan como un catalizador para fortalecer los lazos comunitarios, cerrando con broche de oro una jornada que quedará en la memoria de los habitantes de Chietla.