Técnicos veterinarios adscritos a la Secretaría de Agricultura y al Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), confirmaron un caso del Virus del Papiloma Bovino (VPB) en una res del municipio de Santa Inés Ahuatempan, Puebla. La detección se logró como parte del seguimiento clínico realizado por el área de Proyectos Productivos del Ayuntamiento 2024-2027, en coordinación con las Escuelas de Campo.
El diagnóstico fue realizado por los médicos veterinarios zootecnistas Heladio Espinoza y Juan José Morales, así como por los pasantes Jessica Sánchez O. y Jorge S. Celestino. Durante una revisión de rutina, los especialistas identificaron lesiones visibles en la piel de un ejemplar bovino, las cuales resultaron ser verrugas asociadas al Virus del Papiloma Bovino, una enfermedad viral contagiosa que provoca tumores benignos en la piel y mucosas de los animales infectados.
Este padecimiento afecta principalmente a animales jóvenes de entre 6 y 12 meses, aunque también puede presentarse en adultos. En este caso particular, los papilomas se localizaron en la cabeza, cuello y zona torácica del animal, lo cual permitió una detección temprana y oportuna.
Ante la confirmación del virus, el equipo veterinario procedió a aplicar un tratamiento de hemoterapia para fortalecer el sistema inmunológico del animal afectado. Asimismo, se implementaron medidas preventivas para evitar la propagación del virus dentro del hato.
Entre las recomendaciones emitidas al productor se encuentran:
• Aislar de inmediato al animal infectado.
• Monitorear permanentemente al resto del ganado.
• Desinfectar áreas comunes, corrales y utensilios.
• Evitar el uso compartido de instrumentos sin la debida limpieza previa.
La administración municipal resaltó que este tipo de acciones forman parte del compromiso local por mantener la sanidad animal, así como por garantizar una producción ganadera segura y eficiente en la región mixteca.
Autoridades locales aprovecharon la detección de este caso para exhortar a las y los ganaderos del municipio a mantenerse en contacto con las brigadas veterinarias, a fin de reportar cualquier anomalía en sus animales y aplicar protocolos de bioseguridad.
“El diagnóstico oportuno es clave para prevenir afectaciones mayores, tanto en la salud del hato como en el rendimiento productivo de las unidades ganaderas”, subrayaron los técnicos encargados del seguimiento.
El caso también servirá como referencia para reforzar las capacitaciones que se imparten en las Escuelas de Campo del municipio, donde se abordan temas de sanidad, buenas prácticas y control de enfermedades en animales de producción.