Desde Huaquechula al diamante

-Mixteco juega Mundial Sub-12 en China

Redacción / Información regional.

A miles de kilómetros de su tierra natal, en un estadio diseñado para que los sueños infantiles tomen forma, un joven de la mixteca poblana representa algo más que a su país. José Ángel Romano Cruz, de apenas 12 años, no sólo es parte de la Selección Mexicana de Beisbol Sub-12 que compite en el Mundial de la WBSC, es también la encarnación del talento oculto en los pueblos de la región mixteca, muchas veces ignorada por el deporte profesional.

Originario de El Paraíso, una pequeña comunidad del municipio de Huaquechula, Puebla, José Ángel se ha convertido en un emblema de perseverancia para su localidad y para toda la región mixteca. Este jueves, partió hacia Tainan, Taipéi, acompañado de sus padres, quienes lograron viajar gracias al respaldo económico del gobierno local. El motivo del viaje no es menor: representar a México en la Copa Mundial de Beisbol Sub-12, evento que se celebra del 25 de julio al 3 de agosto de 2025.

Este certamen, organizado por la Confederación Mundial de Beisbol y Softbol (WBSC), es considerado el torneo más prestigioso a nivel infantil. Se lleva a cabo en el estadio internacional Asia-Pacífico, el único en el mundo diseñado exclusivamente para jugadores Sub-12. Participan selecciones de alto calibre como Estados Unidos, Japón, Corea del Sur, Cuba, República Dominicana y otros nueve países.

En medio de esos grandes nombres y potencias deportivas, José Ángel Romano destaca por su origen y contexto. La mixteca poblana, una zona caracterizada por el trabajo agrícola y la migración, no es comúnmente reconocida como semillero de deportistas de alto rendimiento. Sin embargo, con disciplina, entrenamiento constante y el apoyo familiar, este joven pelotero logró abrirse paso entre cientos de aspirantes para formar parte del roster nacional.

Su inclusión en la Selección Mexicana no sólo representa un logro personal, sino una esperanza colectiva para muchos niños de comunidades similares que anhelan una oportunidad para demostrar su talento. Para Huaquechula y la región, José Ángel es motivo de orgullo, un testimonio vivo de que la excelencia puede surgir desde lo profundo del campo, desde pueblos donde los sueños suelen chocar con la falta de recursos.

A nivel nacional, su presencia también pone en evidencia la necesidad de ampliar la mirada hacia las zonas rurales en la búsqueda de nuevos talentos deportivos. José Ángel no se formó en academias de alto nivel ni en ligas privadas, sino en campos polvorientos y canchas improvisadas, con la guía de entrenadores comunitarios y el esfuerzo de una familia que creyó en él desde el principio.

El Mundial Sub-12 de la WBSC no es sólo una competencia para José Ángel. Es la primera gran vitrina internacional de su carrera, una plataforma donde podrá medir su nivel ante los mejores del mundo y, quizás, ser observado por visores que podrían trazarle un futuro profesional en el beisbol. De momento, él ya ganó una medalla simbólica: haber llevado el nombre de El Paraíso y de la mixteca poblana al otro lado del planeta.

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