«Los hijos también lloran» llega hoy al Teatro del CCU
Por: Carlos Linares Mendoza
Quien visitó la entidad poblana para hablar de la puesta en escena “Los hijos también lloran”, donde comparte créditos con Ludwika Paleta, es el actor y productor Andrés Zuno.
En entrevista para Enlace de la Mixteca, el también modelo compartió “Puebla es nuestra tercera plaza que visitaremos, el público debe ver ‘Los hijos también lloran’, porque es una puesta y obra diferente y sorprendente que no se le parece a otra”.
La obra estará llegando hoy al Teatro del CCU, con dos funciones 19:00 y 21:30 horas, y se cuenta con una promoción del 2×1, al adquirir sus boletos en cualquier localidad a través del sistema de boletaje www.superboletos.com y taquillas del Teatro del CCU.
Al preguntar ¿Por qué elegir a Ludwika Paleta para la obra?, respondió: “Ludwika Paleta y yo somos grandes amigos, le enseñé el libreto para su personaje y aceptó y nos asociamos en la obra, está contenta con el personaje porque refleja similitud con la historia, fue madre a los 19 años, en algún momento de la obra aparece un carrusel, hemos hecho una mancuerna especial, tenemos magia en el escenario, hay una complicidad importante”.
Hablas de la magia del teatro, normalmente el público acude a ver las obras pero desconoce todo lo que existe detrás de ella, en este caso, ¿Cuánto tiempo se llevaron montando la obra? Fue algo que se planeó con dos años y medio, son muchas las personas involucradas en el proyecto, es bueno reconocer el talento de todos los que están presentes, tuvimos dos directores, un escenógrafo maravilloso, producción audiovisual, un equipo técnico que también trabaja desde la oficina; esta obra está hecha en parte con un estímulo fiscal, es importante que existan estímulos de estos para poder lograr producciones de calidad y efectivamente cuando la gente se sienta no sabe de todo lo que existe detrás, entre ellos la escenografía y música.
Finalmente Andrés, ¿Has llorado como hijo?
-¡Claro!, es difícil la muerte de un padre, es un golpe que difícilmente se supera, se aprende a vivir con ella pero nunca te resignas, siempre hay un momento en el que dices: ¿Dónde estás? ¿Por qué no estás?, es un proceso difícil.
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